Se cumplieron 100 días desde que Andrés Manuel López Obrador tomó protesta como Presidente de México, durante este tiempo el peso ha tenido una curva positiva, lo que contabiliza un 4% de ganancia versus el dólar.
¿Cómo le fue al peso en los primeros 100 días del gobierno de AMLO?
¿Por qué se ha apreciado el peso en estos 100 días de gobierno? Hay varios factores internos que alimentaron el comportamiento del peso durante el periodo de la nueva administración. En esencia, el presupuesto presentado para este año cumple con tener disciplina fiscal y la fricción con la iniciativa privada por la cancelación del nuevo aeropuerto tuvo buen fin cuando llegó a un acuerdo con los tenedores de bonos de la obra de infraestructura. El miedo sobre una crisis económica se ha ido diluyendo y el peso ha tenido esto a su favor.
¿Es el mismo sentimiento en el mediano y largo plazo? No. En el futuro existen inquietudes por las decisiones en política económica que podría implementar la nueva administración local. A lo anterior, se adiciona que el proyecto de negocios de Pemex no parece sólido y también los pronunciamientos de las calificadoras sobre la deuda gubernamental mexicana y la de Petróleos Mexicanos. Cualquier amague de las calificadoras versus el gobierno o sus paraestatales le va a mover el tapete al peso. Esto se adereza con los pronunciamientos de ciertos legisladores de Morena que inyectan nerviosismo con sus comentarios (Uso de reservas de Banxico y leyes para sancionar a calificadoras internacionales).
¿Con estos factores por qué el peso ha mantenido solidez? La moneda local ha tenido el viento a su favor. Una serie de eventos durante este primer bimestre del año han sido la razón principal para que el peso se mantenga en buenos niveles. La evidencia de que la economía en el mundo se está desacelerando ha motivado que el banco central de EEUU le ponga una pausa al incremento de sus tasas de interés, el discurso de las autoridades monetarias norteamericanas cambió a un tono de “paciencia” y “flexibilidad” en su intención de aumentar las tasas ¿Por qué? Porque su inflación se mantiene en la meta de estar abajo del 2% y porque Estados Unidos crecerá a un ritmo menor este año. ¿Será que el aumento que por años hemos tenido en las tasas de interés haya llegado a su fin? Podría ser probable. Lo anterior, provocó que casi todas las monedas de países emergentes se apreciaran. Además otros astros se le alinearon al peso: El petróleo subió casi un 10%; Existen avances entre los gobiernos de Washington y Beijing y los cierres de agencias gubernamentales norteamericanas afectaron al dólar.
Lo cierto, es que la fortaleza del peso, podría diluirse, la falta de catalizadores en el corto plazo no eximen a que nuestra moneda viva episodios de volatilidad. Con todos estos factores ¿Desea invertir en dólares? Hagamos cuentas. La tasa de interés se encuentra en niveles de 8.25% y el tipo de cambio en $10.32, así que destinar dinero para una inversión en dólares tendrá que buscar la meta de ganarle a el rendimiento actual de los bonos mexicanos, ¿Cuánto? El tipo de cambio tendría que superar $20.89 por dólar. Algo que en el corto plazo no pinta fácil.
Así pues estos 100 primeros días para nuestra moneda. ¿Y tú que opinas?