Estupenda película estrenada en 1973 donde el protagonista encarnado por Charlton Heston, reside en un mundo al filo del cataclismo y en donde unas galletas verdes forman parte de uno de los finales más inesperados del séptimo arte.
No es cine lo que nos incumbe en este texto y mucho menos hablaremos de imágenes apocalípticas, pero sí de cómo en unos pocos años las visiones futuristas nos alcanzaron y se han puesto al alcance de nosotros.
“Si le hubiera preguntado a la gente qué quería, me habrían dicho que un caballo más rápido”, genial plumazo de Henry Ford a una pregunta que le hacían sobre las necesidades de sus consumidores. La respuesta a la creciente necesidad de desplazamiento que en 1908 existía fue solucionada de un sablazo por un automóvil que vendió en 19 años, 15 millones de unidades, es decir, se vendieron 65,789 unidades del Ford T cada mes, una hazaña.
Las necesidades actuales son diferentes, no sólo necesitamos más medios de transporte, las necesidades exigen que sean seguros, rápidos, económicos y ecológicos. ¿A dónde nos llevará el futuro? Empresas como la californiana Tesla Motors apuesta por fabricar coches eléctricos. Su acción (TSLA) que puede comprarse desde México a través del Sistema Internacional de Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores ha tenido un rendimiento en los últimos 5 años del 542%.
Elon Musk, joven, innovador, fanático de los comics, fundador y presidente de Tesla Motors, actualmente desarrolla otro proyecto: Space X, visualizando que el destino de la humanidad está en la colonización del espacio exterior desarrolla una empresa que está logrando abaratar los costos de viajes espaciales ¿Cómo?, haciendo cohetes reutilizables. Su plan ya tiene frutos: en 2008 consiguió un contrato con la NASA por 1,600 millones de dólares.
Imagínese la escena: Hace 108 años un visionario empresario tocando a su puerta para asociarse con usted en la fabricación de mecanismos que buscaban ser más rápidos que los caballos ¿Qué habría pensado?, ¿Le habría azotado el portón en las narices a Henry Ford?, ¿Hoy apostaría por diversificar una pequeña cantidad de su patrimonio en la empresa de Elon Musk?
Forrest Gump, podaba despreocupado el césped de un campo de futbol en su nativa Greenbow, Alabama, porque el Teniente Dan, había decidido invertir sus ahorros en “una especie de compañía de fruta", acto seguido, Forrest abre una carta con el logotipo de Apple. Escena memorable. Si los personajes invirtieron en Febrero de 1984, la cantidad de 10 USD hoy tendrían 1990 USD. Una reflexión más de esta empresa, actualmente la capitalización de Apple es mayor que el PIB de Hungría.
Steve Jobs, hombre apasionado, inventor, perfeccionista, cuando reinició su aventura en Apple, creía de forma mística en un futuro con dispositivos que almacenarían música en volúmenes inverosímiles, teléfonos más inteligentes que sus dueños y computadoras hermosas y eficientes. ¿A dónde nos llevará el futuro de los dispositivos digitales?
En Dubai se construyen islas en forma de palmera y un edificio de 830 metros de alto se pierde entre los cielos árabes; la empresa Evovelo lanzó hace unas semanas el primer vehículo solar de la historia, Mö, que alcanza 50 km/hr. y se podrá adquirir por 4,500 Euros; la empresa de ventas en línea Alibaba revoluciona al comercio por Internet y actualmente tiene 231 millones de compradores activos en China, más que toda la población de Brasil.
El destino tiene múltiples caminos, todos ellos son emocionantes. En 1900 la humanidad duplicaba todo su conocimiento cada 100 años, a mediados de los setentas lo duplicaba cada 12 años, en los noventa se duplicaba cada 10 años y medio, actualmente se duplica cada 5 años y se estima que para el año 2020 el conocimiento aumentará al doble cada 73 días. Imagíne un mundo donde al terminar el primer semestre de su carrera universitaria mucho de lo que aprendió simplemente será obsoleto. El futuro nos guiña el ojo todos los días, disfrutemos y aprovechemos las oportunidades que nos brinda, grandes visionarios tomaron con firmeza el volante de su destino, es bien sabido, que el futuro es de quien aprovecha las oportunidades. Ahora, yo lo invito a que todo lo anterior lo traduzca en una tangible realidad en sus inversiones.
Twitter: @garoarenas