¿Qué cenaste la noche de año nuevo?, ¿qué deseabas mientras comías a prisa tus 12 uvas?, Sí uno de tus doce deseos fue tener tranquilidad, al igual que para cientos de millones de personas en el mundo no se ha cumplido y es muy probable que durante este año seguirá existiendo mucha incertidumbre. Todo indica que estamos entrando en una recesión económica global.
¿Se avecina una recesión económica global?
Me gustaría que las noticias fuesen mejores, pero un baño de realidad en estos momentos es indispensable para saber a qué nos enfrentaremos. Las proyecciones de organismos internacionales, bancos trasnacionales, gobiernos y empresas no son halagadoras. Es muy probable que durante los próximos meses nos enfrentemos a una recesión que vendrá acompañada de una gran pérdida de empleos. ¿Se perderán más empleos esta vez que hace 12 años durante la crisis hipotecaria subprime?, Sin duda.
Los niveles de desempleo serán muy altos, en México contando 56 días del inicio del llamado al aislamiento ya se contabilizan casi 300 mil nuevos desempleados más los que se irán acumulando durante las próximas semanas y en Estados Unidos las solicitudes por ayuda de desempleo ya sumaban esta semana los 22 millones.
La peor crisis sanitaria de la historia reciente tiene entre la espada y la pared a millones de personas que se la piensan entre salir a buscar el sustento o quedarse en casa y cuidar la salud. Morir de hambre o de una enfermedad es una disyuntiva terrible a la que muchas personas se enfrentan mientras lees estas líneas. El impacto económico que tendrá la pandemia se llevará entre las piernas el crecimiento acumulado durante muchos años para un sinfín de regiones, empresas, comunidades, familias y personas.
Los gobiernos están levantando la guardia ante el escenario económico, aunque la disyuntiva primero fue focalizar las baterías en atender la crisis sanitaria para luego atender la crisis económica, la mayoría de gobiernos han iniciado una cruzada de estímulos fiscales e inyección de dinero en la economía para que los ciudadanos puedan afrontar el aislamiento y luego iniciar un lento proceso para reactivar la economía.
El Fondo Monetario Internacional calcula una caída del PIB global de -3%, mientras que la agencia calificadora Fitch Ratings pronosticó una caída del PIB mundial de -3.9%, para América Latina el Banco Mundial proyecta una caída de -4.6%. La teoría dicta que dos trimestres consecutivos creciendo a tasa negativa o igual a cero es considerado como una recesión técnica, la verdad, es que más allá de los dos trimestres, hoy la preocupación es que el próximo año ya se vean mejoras. El crecimiento de este año, está perdido. Muy probablemente durante el segundo semestre de 2020 se podrá observar que la economía deja de caer y empieza un proceso de recuperación.
Algunas economías saldrán más rápido que otras de la recesión, el futuro sigue siendo incierto en el corto plazo, mientras algunos países como China o España empiezan a calcular cómo se reincorporarán a la normalidad, en México y otros países de Latino América apenas estamos ingresando a la parte más drástica del confinamiento por el COVID 19.
La recesión es imposible de sortear para todo el mundo. Algunos países, regiones y sectores la podrán manejar con mejor margen de maniobra, pero sin duda, estamos en el punto donde la parte más cruda de la recesión a penas inicia.