Una palabra que podría definir con exactitud el estatus actual de los mercados financieros es «contrastes».
Por un lado, la primera mitad de la semana pasada estuvo repleta de un leve escepticismo (pese al estallido del conflicto palestino – israelí) a razón de la laxitud que han estado mostrando diversos funcionarios de la FED en torno al próximo movimiento de la tasa de interés, pues, para muchos, la política monetaria ha alcanzado un nivel lo suficientemente restrictivo para encaminar a la inflación al rango objetivo de 2%, por lo cual ya no sería necesario hacer más incrementos en el rédito referencial. Y, por el otro, la segunda mitad de la semana se vio opacada por los resultados de los niveles generales de precios, dejando entre ver la persistente resiliencia del consumidor, las minutas de la última reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés), y, el agravamiento del conflicto bélico en Medio Oriente, factores que revirtieron por completo el sentimiento de escepticismo, reavivando la idea de un posible nuevo ajuste al alza en las tasas de interés.
A todo esto, ¿habrá afectaciones en la tendencia inflacionaria? ¿La Bolsa detendrá su recuperación? ¿Cómo se verá afectado el sector energético?
Por tercer mes al hilo, el Índice de Precios al Productor (PPI, por sus siglas en inglés) se aceleró, esta vez en el orden de 0.5%, marcando, en términos anuales, su nivel más alto desde abril de 2023, estableciéndose en 2.2% (Gráfica 1).
En línea con el dato anterior, durante septiembre, el Índice de Precios al Consumidor (CPI, por sus siglas en inglés) incrementó mensualmente 0.4% para situarse en una tasa interanual de 3.7%. A su vez, la inflación subyacente avanzó mensualmente 0.3%, con lo cual se ubicó en una tasa anualizada de 4.1% (Gráfica 2).
Por tercer mes al hilo, el Índice de Precios al Productor (PPI, por sus siglas en inglés) se aceleró, esta vez en el orden de 0.5%, marcando, en términos anuales, su nivel más alto desde abril de 2023, estableciéndose en 2.2% (Gráfica 1).
En línea con el dato anterior, durante septiembre, el Índice de Precios al Consumidor (CPI, por sus siglas en inglés) incrementó mensualmente 0.4% para situarse en una tasa interanual de 3.7%. A su vez, la inflación subyacente avanzó mensualmente 0.3%, con lo cual se ubicó en una tasa anualizada de 4.1% (Gráfica 2).
Sin embargo, la lectura de la tasa inflacionaria anual acumula su segundo mes consecutivo sin retrocesos. En tanto, si bien la inflación subyacente anual registra su nivel más bajo desde septiembre de 2021, apunta su cuarta alza mensual al hilo.
Ciertamente, el PPI y el CPI están estrechamente ligados, fungiendo el primero como un indicador adelantado del segundo, pues, en teoría, los productores trasladarán los precios altos a los consumidores.
Ciertamente, el PPI y el CPI están estrechamente ligados, fungiendo el primero como un indicador adelantado del segundo, pues, en teoría, los productores trasladarán los precios altos a los consumidores.
Dicha relación, tal como se expresa en la Gráfica 1 y en la Gráfica 2, se ha estado manifestando durante los últimos 3 meses, haciéndolo cada vez con más fuerza, lo cual comienza a generar incertidumbre en los consumidores sobre las perspectivas inflacionarias a un año; tan sólo en la última lectura, el pronóstico se posicionó en el nivel más alto en 5 meses, en 3.80% (Gráfica 3).
En síntesis, la inflación se ha mostrado renuente a continuar descendiendo, y, dadas las presiones en los precios de los energéticos, podría acentuarse.
En la sesión bursátil del 13 de octubre de 2023, el S&P 500 cumplió 1 año desde que se comenzó a formar el actual bull market, en el cual acumula un retorno de 20.99%.
En la sesión bursátil del 13 de octubre de 2023, el S&P 500 cumplió 1 año desde que se comenzó a formar el actual bull market, en el cual acumula un retorno de 20.99%.
A nivel sectorial, destacan el de tecnología de la información, servicios de comunicación y el industrial, con retornos de 46.68%, 41.97% y 20.05%, respectivamente. Por su parte, servicios públicos, consumo básico y bienes raíces con retornos de -3.65%, 0.13% y 0.79%, a correspondencia, se colocan como los sectores con los peores desempeños (Tabla 1).
El sector energético si bien registra un avance de doble dígito, éste está por debajo del promedio de 15.19%.
En este periodo, los sectores de tecnología de la información, consumo discrecional e industrial han guardado el mayor grado de correlación con la Bolsa. En el lado opuesto, los sectores de energía, servicios públicos y consumo básico los que muestran la menor relación (Tabla 2).
En este periodo, los sectores de tecnología de la información, consumo discrecional e industrial han guardado el mayor grado de correlación con la Bolsa. En el lado opuesto, los sectores de energía, servicios públicos y consumo básico los que muestran la menor relación (Tabla 2).
Considerando únicamente la tendencia predominante y los datos cuantitativos, el sector energético tiene poca relevancia en el comportamiento del S&P 500.
Ahora bien, ¿cómo se han desenvuelto la Bolsa, el petróleo y el sector energético? Tomando en cuenta las periodicidades de los eventos, el S&P 500 ha registrado un retorno promedio superior al 9%, el petróleo ha caído, en promedio, -0.21%, y, el sector energético ha avanzado 1.75% (Tabla 3).
Ahora bien, ¿cómo se han desenvuelto la Bolsa, el petróleo y el sector energético? Tomando en cuenta las periodicidades de los eventos, el S&P 500 ha registrado un retorno promedio superior al 9%, el petróleo ha caído, en promedio, -0.21%, y, el sector energético ha avanzado 1.75% (Tabla 3).
En conclusión, de acuerdo con los datos históricos, el S&P 500 ha sorteado bastante bien diversas etapas del enfrentamiento en Medio Oriente. No obstante, es importante considerar que en el inter (2000 – 2023) han acontecido numerosos acontecimientos en diversas partes del mundo, como auges económicos, procesos de transición energética e incluso, crisis financieras, por lo que es complicado ligar el desempeño de cualquier activo exclusivamente a una serie de eventos.
Por lo pronto y como lo ha venido siendo en la mayoría de los episodios bélicos, la Bolsa irá respondiendo conforme vaya avanzando el fenómeno bélico; no obstante, uno de los catalizadores principales de sus movimientos lo será la temporada de reportes trimestrales.