La semana pasada, Reuters y Max Keiser, reprodujeron declaraciones de este economista respecto al mensaje real y silencioso que está transmitiendo, ahora que está más difundida la situación de “backwardation” (retroceso) en el mercado del oro, que hemos explicado en este blog con amplitud.
Para los lectores que no estén al tanto de esto, le invitamos a leer el blog de “Inteligencia Financiera Global” de Rankia los siguientes artículos publicados: “El oro se encuentra en situación de backwardation”, “Sigue cayendo el oro, ¿hasta cuándo?”, “¿Ha tocado fondo el oro?”.
Ese mensaje de la “backwardation” es que existe una moderada pero creciente desconfianza en el sistema fiduciario (mercado del dinero), esta tendencia parece volverse permanente y obliga a todo aquel que conozca esta situación a actuar en consecuencia, y cubrirse de los eventuales efectos económico-financieros.
¿Por qué hay desconfianza con el dinero? Porque se sigue imprimiendo dinero sin límites para sostener con parches la economía mundial, sin generar más riqueza en la economía real. Ese sistema con base de “dinero papel” solo es sostenible con niveles exponenciales de deuda pública, que está llegando a su fin.
La vía preferida para protegerse del colapso, ha sido históricamente atesorando más y más oro. Los metales preciosos siguen así escondiéndose de la circulación.
En este sentido, confirmamamos que las fluctuaciones en el precio del oro y la plata, ya no son tan importantes ni el indicador a seguir. Del análisis más relevante de su “base” y “cobase” (que mide de diferente manera la relación existente entre su precio al contado y el de su contrato de entrega a futuro), desencadena que la “backwardation” ha estado vigente desde enero de 2013.
Esto significa que incluso antes de las históricas bajadas de los precios de abril, había señales evidentes de que el mercado físico se estaba reduciendo, por el incremento en la reclamación de entrega material del oro y la plata.
Aquella contracción no solo ha continuado en el mercado, sino que también se acentuó con el desplome impulsado de las cotizaciones que hemos mencionado.
En otras palabras, opuesto al lugar habitual que asegura que el oro “ha perdido su brillo” bajando de precio, la realidad es que su abaratamiento provocó una auténtica fiebre mundial por el metal físico, que no da signos de finalizar.
La imagen siguiente dice más que mil palabras. Es cortesía de Sandeep Jaitly, de Feketeresearch.com
Hay aspectos importantes para el contrato del oro a diciembre de 2013: a estas alturas de 2011 y 2012, el contrato a diciembre de cada año tenía una oscilación de -0.40 y -0.51%, respectivamente. Significan que estaban en “contango” (Situación normal, opuesta a la “backwardation”).
Esta situación es distinta. Ya estamos en cobase positiva (backwardation) a pesar de encontrarnos a meses de que el contrato finalice.
La opinión de que el oro y la plata están perdiendo su brillo por la bajada de sus precios, es inocente. El mundo es testigo de una nueva “fiebre del oro” físico.
Hasta la llamada tasa “GOFO” (Gold Forward Offered Rate), la medida de la base en el mercado paralelo OTC (Over-The-Counter, de intercambio directo entre dos partes), se ha vuelto negativa y ha permanecido así desde el 8 de julio, o sea, 18 días hábiles. Este hecho no tiene previo y corrobora que la “backwardation” tiende a la duración.
Hay que tener en cuenta que por la razón del sistema de reserva fraccionaria con que funcionan los bancos de lingotes (Bullion Banks), y a los “préstamos” abundantes de oro de los bancos centrales, hay más acuerdos en el oro de los que es posible efectuar. En este mismo blog explicamos en el anterior post la manera en que el Banco de Inglaterra, “desapareció” 1.300 toneladas de sus depósitos entre febrero y junio pasados, para inundar el mercado y tumbar los precios.
Parece que los más poderosos banqueros centrales siguen sin entender que es una pésima estrategia querer reforzar la confianza y uso de sus monedas (dólares, euros, libras), depreciando y depreciando a los metales monetarios, ya que los metales no los pueden crear a su deseo como los billetes.
El sentido común de las personas, los está conduciendo hacia el refugio financiero, y lo está prefiriendo sobre simples promesas de pago en papel. Las obligaciones en oro, están siendo salvadas.
Por ello las “recompensas” (sobreprecios) sobre la cotización al contado (spot) del oro, han subido en Asia y sobre todo en India.
Después de todos los esfuerzos del gobierno y de los bancos centrales indios por controlar la demanda de oro de sus habitantes. Esperan que hacia finales de agosto la demanda suba aún más como lo ha hecho siempre por etapas. Si los obstáculos siguen, el mercado negro tendrá más trabajo por hacer, sobre todo desde la antigua ruta vietnamita de Ho Chi Minh.
Por último, sea en el lejano Oriente, Europa o América, la cotización del oro y la plata sigue hablando para quien quiera escuchar su mensaje, el mismo que sus opositores, tratan de esconder a toda costa.