Ha estallado el escándalo en la armadora automotriz alemana Volkswagen (VW). En primer lugar en Estados Unidos, las autoridades ambientales notificaron el pasado 18 de septiembre sus violaciones a la Ley de Aire Limpio (CAA). Este escándalo se ha debido a que varios de sus autos cuatro cilindros a diesel de modelos 2009 a 2015 (tanto de la marca Volkswagen como Audi) incumplieron con las normas en la materia. La multa por esto rondaría los 18 mil millones de dólares.
Lo preocupante es que lo hicieron de forma intencionada. Ante la evidencia, la compañía tuvo que admitir que instaló un algoritmo muy sofisticado en sus autos que le permitía detectar cuando estaban siendo sometidos a pruebas, y engañar los controles de emisiones.
Cuando se efectuaron exámenes en el camino los contaminantes lanzados a la atmósfera se dispararon las emisiones hasta 40 veces por encima de los rangos permitidos. Por tanto, no se trató de un fallo, sino de un artero engaño gracias a un “dispositivo de desactivación” en palabras de la CAA.
En el comunicado de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA), la lista de modelos diésel afectados incluye:
- Jetta (modelos 2009 – 2015)
- Jetta Sportwagen (2009-2014)
- Beetle (2012 – 2015)
- Beetle Convertible (2012-2015)
- Audi A3 (2010 – 2015)
- Golf (2010 – 2015)
- Golf Sportwagen (2015)
- Passat (2012-2015)
La firma Volkswagen admitió que 11 millones de sus automóviles alrededor del mundo están equipados con este programa que manipula los resultados de emisiones contaminantes.
Ayer, las acciones de la empresa se siguieron desplomando casi 20 por ciento, con esto su pérdida de valor asciende ya a cerca de 26 mil millones de euros esta semana. Pero el desplome de VW también ha arrastrado a acciones de otras marcas.
Frente a la grave violación de la armadora alemana, hay varios países como Francia, Italia, Corea del Sur, Reino Unidos, además de fiscales estatales estadounidenses que han anunciado que iniciarán investigaciones. Previsiblemente se presentarán cargos criminales. México, no debe quedarse atrás. Porque hasta el momento, no ha habido un solo pronunciamiento del gobierno al respecto.
Aunque no está claro dónde se armaron los vehículos afectados, de lo que no hay duda es de que algunos de los modelos mencionados por la EPA también se comercializan y circulan en el país.
Como es lógico, la confianza y credibilidad de VolksWagen ha sido destruida, además no deben descartarse hallazgos similares en otro tipo de motores. Pero esto solo puede conocerse con la investigación correspondiente, por eso, es urgente que las instancias competentes tomen cartas en el asunto.
En el país, la Norma Oficial Mexicana NOM-042-SEMARNAT-2003 es la que establece los límites máximos de emisiones permisibles de vehículos con un peso menor a 3,857 kg que usan gasolina, gas l.p., gas natural y diésel. Y el Certificado NOM lo expide la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), o en su caso, los Organismos de Certificación acreditados.
En caso de incumplimiento ”el personal de PROFEPA comunicará de inmediato al titular del Certificado NOM la suspensión o cancelación del mismo, sin perjuicio de las sanciones que procedan.”
Por eso, las autoridades no deben perder tiempo: Semarnat y Profepa deben manifestarse al respecto y sobre todo informar a la ciudadanía de los resultados de la investigación que proceda. Si encontraran alguna anomalía lo único que tienen que hacer es proceder conforme a la ley. No podemos ser la excepción.
