Ahorrar es uno de los hábitos básicos de unas buenas finanzas personales, por lo que es uno de los primeros conceptos que deben aprender los más pequeños en cuanto al dinero. Ahora bien, una cosa es ahorrar y otra distinta es tener un plan de ahorro. Pero, ¿qué es un plan de ahorro? ¿Cómo hacerlo?
¿Qué es un plan de ahorro?
Ahorrar se define como la acción de separar y guardar una parte de los ingresos que recibimos para un uso futuro. En ocasiones, el ahorro no sigue una estructura fija y puede tenerse como fondo de emergencia para solventar gastos inesperados. Esta es una de las formas de ahorrar, y es bastante útil, importante y necesaria, sea cual sea tu situación personal o familiar.
Ahora bien, cuando el ahorro tiene un fin o meta específico es necesario crear un plan de ahorro. Como su nombre lo indica, es una forma de organizar de forma consciente nuestros ahorros para alcanzar una meta específica. No se deja al azar y, por lo general, tiene un horizonte claro y definido.
Ahora bien, cuando el ahorro tiene un fin o meta específico es necesario crear un plan de ahorro. Como su nombre lo indica, es una forma de organizar de forma consciente nuestros ahorros para alcanzar una meta específica. No se deja al azar y, por lo general, tiene un horizonte claro y definido.
Características
Un plan de ahorro se caracteriza por:
- Establecer una meta de ahorro mensual acorde con nuestros ingresos. Las personas que tienen ingresos variables suelen fijar un porcentaje de dicha cantidad en su plan de ahorro. Mientras que si se tienen ingresos más estables, es posible planificar una cantidad determinada de dinero para completar el objetivo mensual.
- Tener un objetivo claro. Por lo general, se prevé un horizonte temporal en el cual se deberá completar el plan de ahorro. No necesariamente tiene que ser una meta por vez, pueden ser varias. También pueden aplicarse a situaciones donde no sabemos cuánto vamos a necesitar, pero sí sabemos cuándo. Un ejemplo de esto último es cuando creamos un plan de ahorro para la vejez por nuestra propia cuenta, además de las cotizaciones que hacemos en la Afore.
- Tener una estructura: Como mencionamos antes, el plan de ahorro no se limita a simplemente guardar de lo que nos sobra. Se trata de tener disciplina y cumplir con un requerimiento que nos hemos autoimpuesto a fin de alcanzar un objetivo.
¿Cómo hacer un plan de ahorro?
Ahora que ya sabes qué implica hacer un plan de ahorro, veamos los pasos que puedes seguir para conseguir crear el tuyo:
- Establece un objetivo. Lo primero es tener una meta o propósito para el ahorro. A diferencia de un fondo de emergencia, donde la cantidad ahorrada y la periodicidad es mucho más flexible, un plan de ahorro tiene una meta y un plazo determinado. Tu plan de ahorro puede incluir una o más metas, todo depende de ti.
- Realiza un organigrama. Cumplir con tu plan de ahorro será mucho más fácil si observas tu progreso y llevas un registro ordenado de tu ahorro. Existen muchas herramientas móviles que te permiten llevar este tipo de control, o puedes usar una agenda en físico, como te sientas más cómodo.
- Divide tu objetivo general en objetivos específicos. Suena a tesis de grado, ¿cierto? Pues bien, al igual que un proyecto de grado tiene un objetivo general que se alcanza por etapas que se reflejan como objetivos específicos, el plan de ahorro debe dividirse en pasos que sean sencillos de seguir. Si pensamos solo en la cantidad que necesitamos podemos verlo como algo difícil o muy lejano. Pero si fijamos la vista en pequeñas metas de corto plazo, será mucho más fácil cumplir nuestro objetivo.
- Organiza tus finanzas en función de tu plan. Antes de organizar tu plan de ahorro es importante que organices tus finanzas con un presupuesto mensual. Así podrás ver claramente cuánto ganas y cuánto gastas para saber a qué te enfrentas.
- Reduce tus gastos y aumenta tus ingresos. Para ayudarte a alcanzar tu meta, es útil que reduzcas todos aquellos gastos que son innecesarios, o bien cambiar hábitos de consumo por otros más prácticos. De igual forma, puedes buscar maneras de generar ingresos adicionales o ingresos pasivos y potenciar así tu plan de ahorro.
- Sé constante y disciplinado. Es quizá la parte más complicada de hacer un plan de ahorro, ya que nuestras circunstancias y necesidades pueden cambiar de la noche a la mañana. Pero, de ser posible, es importante que te apegues al plan y no tomarlo a la ligera. Para ayudarte con este punto, te mostramos una técnica que te puede ser útil.
Plan de ahorro: Regla de los 21 días
La regla de los 21 días es un método psicológico que ayuda a la persona a crear un hábito en su vida, y es un recurso que puedes usar para crear tu plan de ahorro y convertir esta práctica en un hábito.
En teoría es bastante sencillo: el objetivo es fijarte una meta diaria de ahorro y guardar dicha cantidad sin fallar durante 21 días consecutivos. Claro que en la práctica puede ser un poco más complicado, pero este es el punto, proponerte una meta y cumplirla. Si fallas un día, tienes que volver a comenzar, aunque no está de más que dejes lo que ya tenías ahorrado. El resultado puede sorprenderte.
Una vez que conviertas el ahorro en un hábito regular, tendrás la constancia que necesitas para crear tu plan de ahorro y seguirlo de forma ordenada.
En teoría es bastante sencillo: el objetivo es fijarte una meta diaria de ahorro y guardar dicha cantidad sin fallar durante 21 días consecutivos. Claro que en la práctica puede ser un poco más complicado, pero este es el punto, proponerte una meta y cumplirla. Si fallas un día, tienes que volver a comenzar, aunque no está de más que dejes lo que ya tenías ahorrado. El resultado puede sorprenderte.
Una vez que conviertas el ahorro en un hábito regular, tendrás la constancia que necesitas para crear tu plan de ahorro y seguirlo de forma ordenada.