Un gran amigo y socio mío me preguntó recientemente sobre la inversión en metales preciosos. Hablemos de ellos.
¿Qué tan redituable ha sido exponerse a los metales preciosos?
¿Qué tan redituable ha sido exponerse a los metales preciosos?
Cuando contrastamos el desempeño del oro, la plata, el platino y el paladio contra el del mercado bursátil, encontramos que, en los últimos 38 años, en conjunto, han registrado un desempeño muy inferior, promediado un retorno del orden de 528.22% contra el 2,528.86% ofrecido por el S&P 500 (Gráfica 1).
No obstante lo anterior, entre el cuarteto, han destacado el paladio y el oro con retornos de 865.98% y 667.20%, respectivamente.
Sin intención de contradecir los datos históricos, un punto que no podría ser omitido es que, naturalmente, los metales preciosos han sido catalogados desde tiempos inmemoriales como activos refugio, muy particularmente el oro.
Sin intención de contradecir los datos históricos, un punto que no podría ser omitido es que, naturalmente, los metales preciosos han sido catalogados desde tiempos inmemoriales como activos refugio, muy particularmente el oro.
En ese sentido, cuando se analiza el desempeño del S&P 500 y estos activos durante los episodios recesivos, los últimos superan por mucho al primero con un retorno promedio de 1.87%, destacando el oro y el paladio con 19.36% y 5.38, a correspondencia (Tabla 1).
Sintetizando, los metales preciosos si bien no superan al mercado resultan ser un excelente componente para una estrategia de largo plazo, así como un gran amortiguador en periodos de crisis.
Ahora bien, en cuanto a las formas de invertir, existen 2 formas; directa e indirecta, revisemos las principales (Tabla 2):
Ahora bien, en cuanto a las formas de invertir, existen 2 formas; directa e indirecta, revisemos las principales (Tabla 2):
- I. Se trata de la vía más tradicional de exponerse en este tipo de activos, consistiendo en la adquisición de monedas, medallas o bien, lingotes.
- II. Es otra de las maneras más comunes de inversión, con la gran diferencia que no se está poseyendo físicamente el metal precioso en cuestión, pero se goza (indirectamente) de los incrementos de su precio. Dependiendo de la estrategia y el perfil de inversionista, pueden adquirirse Fondos Cotizados en Bolsa (ETFS, por sus siglas en inglés) o fondos de inversión compuestos ya sea por acciones de compañías mineras o un conjunto de metales o incluso que repliquen el comportamiento de un metal específico.
- III. Comprar acciones de empresas productoras de metales preciosos no sólo brinda exposición indirecta a la fluctuación de los precios, sino también a posible cobro de dividendos. Hablando de las principales compañías por metal destacan en el oro (NYSE: NEM); en la plata (LSE: FRES); en el platino (JSE: AMS), y, en el paladio (MCX: GMKN).
- IV. Hacerse de alhajas como anillos, aretes, cadenas, collares, colgantes, diademas o tiaras, pulseras y relojería es otra forma de participación en este mercado, con la distinción de adhesión de otros componentes; la marca, antiguos dueños (en caso de comprar la joya en una casa de subastas) y el valor sentimental.
- V. Si bien aún sólo es posible lograr exponerse al oro a través del PAXG y el XAUT, esta opción alude a criptomonedas de la tipología stablecoins cuyo precio está referenciado al oro. Entre las principales ventajas destacan que, a diferencia de sus principales pares, dada su composición, su comportamiento es menos volátil, aunado a que, de lado de la comercialización, es más rápida.
En este tipo de inversión, todo depende del capital disponible y las metas financieras.
Finalmente, analicemos el comportamiento de 3 tipos de inversión en oro y plata en distintas periodicidades (Tabla 3).
De forma general y puramente concentrándonos en los 2 activos bajo los 6 marcos temporales, el oro destaca por encima de la plata; 49.15% contra 26.50%. En cuanto al tipo de inversión, en ambos casos sobresale el metal físico; 59.47% para el oro, y, 55.23% para la plata. Hablando de los ETFS, continúa con la batuta el que representa al oro (GLD) con un retorno de 49.41% contra el registrado por su par (SLV) de 42.73%. Y, en lo que concierne a las acciones, sobresalen los de la minera canadiense, NEM, con 38.55% contra el -18.46% de la minera mexicana, FRES. En este último punto, es importante mencionar que la comparación resulta más compleja, pues la cotización de las acciones de una empresa se ven afectadas por más variables que por sólo la fluctuación del precio de sus materias primas.
Vistos estos datos, es muy claro que un portafolio de inversión no podría estar completo sin una ponderación en metales preciosos.