La decisión de la Casa Blanca de incrementar los aranceles al acero y aluminio ha sido muy criticada en estos últimos días, y ha causado que varios países amenacen con iniciar una guerra comercial en contra del gobierno de Trump. Sin embargo, esta medida pudiera no tratarse de un capricho como los que acostumbra el mandatario, sino de una decisión forzada por las circunstancias.