Hace un mes terminé uno de los retos que me había propuesto durante la cuarentena: Leer completo un libro sobre economía en francés, el título que elegí fue “Ce qu’on voit et ce qu’on ne voit pas” (Lo que se ve y lo que no se ve) de Frédéric Bastiat es una lectura bastante breve. La razón por la que estoy mencionando este acontecimiento no es comenzar a citar indiscriminadamente párrafos de este libro en este artículo sino más bien compartir las implicaciones que este libro ha tenido en mis decisiones en el día a día últimamente. Después de haber leído ese libro pienso con mayor frecuencia si, de todo lo que se hasta ahora, existe algo que aún no estoy percibiendo en el horizonte económico.
Diariamente nos enfrentamos a una avalancha de noticias financieras que en algunas ocasiones nos ayudan y en otras nos estorban para tomar decisiones de inversión y de negocios mi recomendación no es que dejemos de informarnos sino que además de recibir información externa también pongamos más atención a la información interna y nos hagamos preguntas como: ¿Lo que hasta ahora conozco es lo de hoy o es lo del mañana?, ¿Otros están pensando en la misma posibilidad de mañana que yo?, ¿Cuáles podrían ser otras alternativas a lo que estaba pensando hasta ahora? y ¿Que podría necesitarse pasado mañana?. Te aseguro que muchos de los ganadores de hoy y de mañana se hicieron esas preguntas ayer.