La inclusión financiera sigue siendo uno de los grandes retos del sistema financiero mexicano. Aunque en los últimos años se han logrado avances significativos, cerca de la mitad de la población aún no tiene acceso al crédito, y muchas personas recurren a fuentes informales para financiarse.
¿Cuántos mexicanos no tienen acceso al crédito?
De acuerdo con la última Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF), el 48% de la población mexicana de entre 18 y 70 años no cuenta con financiamiento formal, y la mayoría no accede a crédito porque no es candidata.
Principales razones para no solicitar un crédito:
- Preferencia por evitar deudas.
- Percepción de que no cumplen los requisitos.
- Falta de interés o necesidad.
- Consideran que los tipos de interés son altos.
- Experiencias negativas previas.
Entre quienes sí cuentan con financiamiento formal, el 31% utiliza opciones informales, como préstamos de familiares, amigos, cajas de ahorro o casas de empeño.
Causas más comunes de rechazo de un crédito
Acceder a crédito puede mejorar la calidad de vida al permitir a las personas cubrir emergencias, financiar proyectos o adquirir bienes de alto costo. Sin embargo, para un 17% de los mexicanos, las solicitudes de crédito han sido rechazadas por razones diversas.
Principales causas de rechazo de crédito:
- Problemas con el Buró de Crédito (36%)
- Ingresos insuficientes (27%)
- Falta de historial crediticio (19%)
- Documentación incompleta (11%)
- Falta de fiador o aval (4%)
La edad como factor determinante en la aprobación de créditos
La edad desempeña un papel crucial en la obtención de financiamiento. Los jóvenes enfrentan mayores dificultades, principalmente debido a la falta de historial crediticio.
- 31% de las personas entre 18 y 29 años ha sido rechazada al carecer de antecedentes financieros.
- A medida que aumenta la edad, el principal problema es la mala calificación en el Buró de Crédito, afectando al 43% de quienes tienen entre 30 y 44 años y al 41% de las personas entre 45 y 59 años.
¿Qué hacer si rechazan tu solicitud de crédito?
Recibir la negativa de una institución financiera para otorgar un crédito puede ser desalentador, pero es importante no desanimarse. La clave está en identificar la causa del rechazo y actuar de manera estratégica para mejorar tu perfil crediticio y aumentar tus posibilidades de aprobación en el futuro. A continuación, te presentamos las principales razones de rechazo y cómo abordarlas:
Falta de historial crediticio
La ausencia de un historial crediticio es uno de los motivos más comunes por los que se rechazan solicitudes, especialmente entre personas jóvenes o quienes no han interactuado con productos financieros antes.
- Solicita una tarjeta departamental: Estas tarjetas suelen tener requisitos más accesibles y son una excelente manera de comenzar a construir tu historial financiero. Al usarla y pagar puntualmente, demostrarás tu capacidad de manejo responsable del crédito.
- Consulta con tu banco actual: Si recibes tu nómina en un banco, este podría ofrecerte una tarjeta de crédito básica o algún producto financiero con condiciones más flexibles debido a tu relación previa con ellos.
- Pide créditos pequeños: Algunas instituciones ofrecen préstamos de bajo monto diseñados para personas sin historial. Estos pueden servir como una puerta de entrada al crédito formal.
Ingresos insuficientes
El nivel de ingresos es un factor determinante en la aprobación de un crédito, ya que las instituciones evalúan tu capacidad de pago con base en lo que ganas.
- Negocia el monto del crédito: Si el monto solicitado es alto en comparación con tus ingresos, considera reducir la cantidad que planeas financiar. Esto puede hacer que tu perfil sea más atractivo para la institución.
- Busca alternativas de financiamiento: Algunas cooperativas, microfinancieras o fintechs tienen criterios más flexibles y ofrecen créditos adaptados a personas con ingresos menores.
- Aumenta tu ingreso comprobable: Si tienes un trabajo adicional o percibes ingresos por actividades independientes, asegúrate de documentarlos adecuadamente para que sean tomados en cuenta.
Problemas con el Buró de Crédito
Un historial crediticio negativo o un puntaje bajo puede ser una barrera importante. Este problema suele derivar de pagos atrasados, deudas pendientes o errores en el registro de tu historial.
- Prioriza el pago de deudas pendientes: Si tienes atrasos o cuentas en mora, trata de liquidarlas lo antes posible. Esto no solo mejorará tu puntaje, sino que también aumentará tu credibilidad financiera.
- Solicita una revisión de tu historial: Es posible que haya errores en los registros del Buró de Crédito. Solicita tu reporte gratuito y verifica que toda la información sea correcta. En caso de errores, inicia el proceso para corregirlos.
- Pacta acuerdos con acreedores: Si no puedes liquidar toda la deuda de una vez, considera negociar planes de pago con las instituciones correspondientes para reducir tus saldos vencidos.
Documentación incompleta
Uno de los pasos más básicos, pero fundamentales, es asegurarte de que cumplas con todos los requisitos documentales que exige la institución financiera.
- Revisa la lista de requisitos: Antes de volver a solicitar un crédito, asegúrate de tener toda la documentación necesaria, como identificaciones oficiales, comprobantes de ingresos, estados de cuenta bancarios y cualquier otro documento que solicite la institución.
- Consulta con un asesor: Si no estás seguro de qué documentos necesitas, pide ayuda a un asesor financiero o directamente al personal del banco para evitar malentendidos o errores en tu expediente.
- Organiza tu información: Mantén tus documentos actualizados y bien organizados para facilitar el proceso en futuras solicitudes.
En resumen, la inclusión financiera no solo depende de las instituciones, sino también del esfuerzo individual por entender el sistema financiero y aprovechar sus herramientas. Construir un historial crediticio sólido y mantener una relación sana con las finanzas personales son pasos clave para acceder a mejores oportunidades en el futuro.