En el mundo de las inversiones todos buscamos la mejor experiencia, donde nuestro dinero obtenga el máximo rendimiento con el mínimo o nulo nivel de riesgo y desafortunadamente esta ecuación aún no existe, lo que sí podemos esperar con un especialista en inversiones es que escuche mis necesidades y objetivos de la inversión.
La experiencia debe ser la misma que cuando acudimos con el sastre, el traje debe estar hecho a la medida del cliente, porque cada persona tiene objetivos diferentes, tolerancia al riesgo diferente y expectativas de la inversión diferente, conociendo estos puntos fundamentales nos permitirá diseñar una estrategia correcta, para ello es necesario hacer algunas preguntas que el inversionista deberá de contestar con certeza.
1.- ¿Qué instrumentos de inversión conoce?
- Deuda: estos instrumentos son para un perfil de inversionista conservador, ya que son los más seguros, de estos no debemos esperar rendimientos extraordinarios, entre ellos encontramos Certificados de la tesorería (cetes), Bonos de Desarrollo (bondes), Bonos M y Bonos en Udis.
- Renta Variable: estos instrumentos son para un perfil más patrimonial, que busca un rendimiento por arriba de la tasa de cetes, entre ellos podemos encontrar fondos de inversión indexados, acciones y también podemos incluir los instrumentos derivados
2.- ¿Cuál es su horizonte de inversión?
- Corto: dinero que necesitamos tener líquido y no podemos invertirlo por más de tres meses
- Mediano: de uno a tres años, tiempo suficiente para poder obtener mejores rendimientos con una buena estrategia.
- Largo Plazo: tres años en adelante, en este tiempo podemos diversificar en varios activos financieros y nos permitirá tener un rendimiento de tres veces la tasa libre de riesgo, esto dependerá de la disciplina con que llevemos nuestro portafolio.
3.- ¿Objetivo de la inversión?
Compra de un inmueble, iniciar un negocio, cambiar el coche, o el retiro.
Ejemplo:
Si nuestra inversión es para adquirir un inmueble o iniciar un negocio, nuestro patrimonio deberá estar en títulos de deuda, ya que lo único que esperamos es llegar a nuestro objetivo y estar por lo menos arriba de inflación.
Y si nuestro objetivo de inversión es de retiro, tenemos la oportunidad de invertir en títulos de renta variable, históricamente la renta variable paga bien, una persona que compró títulos de la bolsa mexicana de valores en el 2008 y dejó su inversión intacta hasta el 2016 tiene un rendimiento por arriba del 189%, pero en el inter tuvo momentos con minusvalía, lo único que debemos saber que cuando tenemos claro un objetivo lo que pase de corto plazo no nos debe quitar el sueño, siempre y cuando seamos ordenados y disciplinados.
Al depositar su confianza en una institución lo mínimo esperado como cliente es la atención de un profesional de inversiones que escuchará y entenderá sus necesidades, para encontrar el equilibrio entre la liquidez que necesita, objetivo de su inversión, aversión a la volatilidad, rendimiento esperado. Recordemos que la institución a la cual nos acerquemos se debe adecuar a nuestras necesidades financieras.