La palabra “burbuja de la recuperación” (bubblerecovery) se encuentra en Investopedia, un sitio en internet dedicado principalmente a la educación en inversiones, que cuenta con un completo diccionario financiero, siendo acuñada por Jesse Colombo, famoso periodista estadounidense de FORBES, el es un importante analista que predijo la última crisis financiera, reconocido por el London Times.
Su definición es la siguiente:
Cuando la economía parece estar volviendo de una recesión, pero en realidad puede estar entrando en una burbuja de activo, haciéndose pasar por una recuperación, causada por la facilidad de obtener crédito barato para conseguir comprar activos. El problema de una burbuja de recuperación es que se diferencía de una verdadera recuperación económica, la cual se basa en fundamentos sólidos, por el contrario la burbuja de recuperación está basada en inversiones especulativas con potencial de crecimiento a corto plazo, pero de incertidumbre a largo plazo.
Con este concepto, Colombo considera que la burbuja inmobiliario del 2007 fue una burbuja de recuperación, porque en vez de experimentar una sostenible y saludable recuperación económica tras el colapso de la burbuja de las punto com en el año 2000, los Estados Unidos simplemente inflaron otra burbuja de activos. Siendo la causa principal la política de las bajas tasas de interés por parte de la Reserva Federal, llegando a su fin con el incremento de tasas de interés para reducir la inflación.
Del mismo modo, Colombo señala que la llamada “recuperación económica” después de la Gran Recesión (la peor crisis desde la gran depresión, comprendida en el periodo del 2007-2009) es la mayor burbuja de recuperación económica de todas. La Reserva Federal bajó las tasas de interés nuevamente, pero esta vez la burbuja de recuperación se basó sobre la actividad económica en China, Canadá, Australia, países nórdicos, los mercados emergentes y las materias primas. En Estado Unidos se observan sobrevaloraciones de empresas de redes sociales como Facebook, LinkedIn, Twitter, en el mercado inmobiliario sobre todo en algunas regiones del país; el mercado de valores y los precios irrazonables en la educación universitaria y la sanidad.
Colombo observa factores como el precio de las acciones con el ratio precio-beneficio, (relación entre el precio o valor de la acción y los beneficios de la empresa), la capitalización del mercado de valores de Estados Unidos con relación al PIB, (determinando que está sobrevalorado según datos del banco mundial) margen de deuda de la Bolsa de Nueva York y la volatilidad del índice bursátil Dow Jones (las 30 empresas más significativas de todas las industrias de los Estados Unidos) para apoyar sus argumentos de la “burbuja de la recuperación”.
Las personas que están de acuerdo con los argumentos de Jesse Colombo tienen cautela al hacer inversiones durante la burbuja de recuperación económica, ya que tienen en cuenta que sus efectos son temporales, y pueden aparentar una mejora, por ejemplo en el aumento de los puestos de trabajo, crecimiento económico y sobretodo en los precios de los activos que disminuirán conforme la burbuja estalle. Estas personas pueden ver claramente que cuando las tasas de interés bajan los inversores corren a inversiones de mayor riesgo dejando de lado las inversiones conservadoras, siempre destacándose por tratar de justificar los altos precios que los activos alcanzan y que carecen de fundamentos.
Este famoso analista añade que la falsa recuperación económica terminará cuando estallen de una manera violenta todas las burbujas económicas post 2009 y volveremos al declive económico que comenzó en el año 2000, siendo más trágicas las inevitables consecuencias.
En la siguiente entrega de esta serie analizaremos cómo se están repitiendo señales en el 2016 que se vivieron justo antes de la última crisis financiera que sacudió al mundo.