Debate sobre las reformas estructurales de México
A inicios de este mes de octubre, desde la Residencia Oficial de Los Pinos, el titular de Banco de México , Agustín Carstens, dijo que la reforma financiera ayudará al país a "incrementar la tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto potencial".
Además sostuvo que con esta reforma "se sientan las bases para una intermediación financiera más eficiente que derivará en una aceleración del crecimiento económico sostenido, una mayor generación de empleos mejor remunerados y, en suma, en mayor bienestar para todos los mexicanos."
Carstens aseguró también que con esta reforma nuestra máquina financiera "marchará por fin a una velocidad mayor, sin sobresaltos".
Sin embargo y en contraste, hoy el Fondo Monetario Internacional opinó todo lo contrario y le bajó el acelerador al encargado del banco central, pues esta institución que fomenta la cooperación monetaria entre sus más de 150 países miembros aseguró que "el efecto de las reformas estructurales en el crecimiento de México será más lento" y prevé que entre 2015 y 2019 el PIB de México avanzará a un ritmo promedio de 3.7 por ciento; cuando las autoridades mexicanas habían declarado a sus ciudadanos que para el mismo periodo al que se refiere el FMI, México iba a llegar a una expansión económica de 4.8 por ciento en promedio y con tasas de 5.2 por ciento para 2017, 2018 y 2019.
Recordemos que en sus últimos informes de mediano plazo, las previsiones del FMI han variado poco.
¿Quién tiene la razón? ¿quién se acerca más a la realidad económica de México? ¿tendrá algo qué ver que 2015 es año electoral en México?
Misael D'Mora