Una de las frases más curiosas que existen dentro del compilado financiero dice lo siguiente: «Como va enero, va el resto del año».
El Barómetro de enero refiere a una teoría del mercado de valores cuyo postulado principal es que, de acuerdo con el retorno de enero (positivo o negativo), será el retorno del año corriente.
El Barómetro de enero refiere a una teoría del mercado de valores cuyo postulado principal es que, de acuerdo con el retorno de enero (positivo o negativo), será el retorno del año corriente.
¿Qué tan cierta es esta teoría? Si se considera la historia de los últimos 95 años del S&P 500, el 71% de las veces se ha cumplido, de las cuales el 72% el mercado ha cerrado positivo, mientras que el 28% sobrante, negativo (Gráfica 1).
Dicho lo anterior y tomando como base el retorno mensual acumulado del S&P 500 al corte del 27 de enero de 2023, del orden de 6.02%, ¿sería éste un año alcista?
Prácticamente, casi todos los sectores del mercado han comenzado en números verdes el 2023, estando en la batuta con avances de doble dígito los sectores de servicios de comunicación (XLC) y de consumo discrecional (XLY). Hablando de los 3 sectores que han registrado un comportamiento retador en las primeras 4 semanas del año, se encuentran el de servicios públicos (XLU), de consumo básico (XLP) y de cuidado de la salud (XLV), con un retorno promedio de -2.25% (Tabla 1).
Pese a estos números, a la décimo octava sesión bursátil del año, el S&P 500, en términos técnicos, prosigue en un bear market, al tiempo que sólo 4 de los 11 sectores han logrado converger hacia su punto de equilibrio, encontrándose ya en un bull market, destacando en los dos primeros lugares los sectores de energía (XLE) y de materiales (XLB) con 35.18% y 23.89%, a correspondencia, mientras que, los dos que han registrado una recuperación más lenta son los sectores de consumo básico (XLP) y de cuidado de la salud (XLV), con 9.56% y 11.29%, respectivamente (Tabla 2).
Partiendo en que continuamos en bear market, los sectores de tecnología (XLK), consumo discrecional (XLY), industrial (XLI) y servicios financieros (XLF) han guardado el mayor grado de correlación con el comportamiento del S&P 500 (Tabla 3).
Prácticamente, casi todos los sectores del mercado han comenzado en números verdes el 2023, estando en la batuta con avances de doble dígito los sectores de servicios de comunicación (XLC) y de consumo discrecional (XLY). Hablando de los 3 sectores que han registrado un comportamiento retador en las primeras 4 semanas del año, se encuentran el de servicios públicos (XLU), de consumo básico (XLP) y de cuidado de la salud (XLV), con un retorno promedio de -2.25% (Tabla 1).
Pese a estos números, a la décimo octava sesión bursátil del año, el S&P 500, en términos técnicos, prosigue en un bear market, al tiempo que sólo 4 de los 11 sectores han logrado converger hacia su punto de equilibrio, encontrándose ya en un bull market, destacando en los dos primeros lugares los sectores de energía (XLE) y de materiales (XLB) con 35.18% y 23.89%, a correspondencia, mientras que, los dos que han registrado una recuperación más lenta son los sectores de consumo básico (XLP) y de cuidado de la salud (XLV), con 9.56% y 11.29%, respectivamente (Tabla 2).
Partiendo en que continuamos en bear market, los sectores de tecnología (XLK), consumo discrecional (XLY), industrial (XLI) y servicios financieros (XLF) han guardado el mayor grado de correlación con el comportamiento del S&P 500 (Tabla 3).
Si bien tanto el XLY como el XLK se posicionan en el top 3 de los sectores con los mayores balances acumulados anuales, al revisar la Tabla 2 nos percatamos que solamente el XLI ha logrado recuperarse completamente del bear market, en el orden de 22.09%.
Por otro lado, ningún sector ha marcado un nuevo máximo histórico. En ese sentido y considerando la Tabla 3, los sectores con la mayor correlación con respecto al S&P 500 promedian un diferencial del orden de -17.10%, mientras que los 11 sectores en su conjunto, -14.74% (Tabla 4).
Por otro lado, ningún sector ha marcado un nuevo máximo histórico. En ese sentido y considerando la Tabla 3, los sectores con la mayor correlación con respecto al S&P 500 promedian un diferencial del orden de -17.10%, mientras que los 11 sectores en su conjunto, -14.74% (Tabla 4).
Como conclusión, podemos afirmar que los sectores con la mayor preponderancia en el mercado fundamentan el avance registrado en el corto plazo, pero en cuanto al horizonte de mediano plazo, no necesariamente se explicará por éstos, aunado a que, muchos inversionistas (equivocadamente) están apostando a que ya nos encontramos en los niveles límite de restricción monetaria, pudiendo esperarse entonces un menor dinamismo.