Acceder

El porqué de la guerra comercial entre China y Estados Unidos

Las tensiones comerciales se volvieron endurecer en un escenario en el que los jugadores tienen dos visiones completamente distintas. Convirtiéndose de esta forma en el riesgo más grande para la economía global.

 

La semana pasada, EE.UU. y China retomaron las negociaciones comerciales en Shanghái. Lamentablemente, los negociadores de ambos países consideraron que hubo poco progreso y acordaron volverse a reunir en el mes de septiembre. Sin embargo, a  Trump no le gustó y decidió imponer nuevos aranceles sobre productos chinos.

Este acrecentamiento de las tensiones comerciales, llevó a que los principales mercados financieros del mundo se desplomaran al igual que la divisa mexicana y el petróleo. Por su parte, China tomó la decisión de devaluar su moneda como respuesta ante los aranceles de Trump (aunque su banco central niegue que esta sea la razón).

La tensión que han generado las dos economías más grandes del mundo parece que no terminará pronto y se consolida así, como el riesgo más grande para la economía global en el 2019. Lo que nos hace preguntarnos ¿Por qué no pueden llegar a un acuerdo?

 

¿Qué está en juego en la guerra comercial?

En esta batalla colosal hay dos visiones completamente distintas. Una de corto plazo y otra de largo plazo. Indudablemente, Trump está pensando en el corto plazo. No podemos perder de vista que el siguiente año son las elecciones de EE.UU. y Trump está buscando cumplir todas las promesas que hizo en su campaña. En este punto, podemos mencionar 2 de sus promesas principales: El muro fronterizo con México y corregir los déficits de su balanza comercial.

En el caso del muro, puede dar por pérdida la batalla ya que para poder construirlo necesita de la aprobación de ambas cámaras y la cámara baja está controlada por los demócratas. No hay forma en la que los demócratas acepten ponerle esa medalla al presidente norteamericano.

En el otro extremo, los principales países con los que EE.UU. tiene déficit en términos de intercambio, son China, México y Canadá.  En este punto, Trump ya tiene la mitad del camino recorrido, ya logró renegociar el TLCAN y sin duda buscará a toda costa conseguir un acuerdo con el mandatario chino para presumirlo a su base electoral como un logro de su mandato.

Por otro lado, debemos recordar que China a diferencia de EE.UU. no es una economía desarrollada. El objetivo de China es muy claro, busca generar las condiciones para que sus habitantes puedan mejorar sus condiciones de vida y la única forma de lograrlo es generando riqueza. Para ello es necesario dar un salto tecnológico que permita un incremento en los niveles de productividad.

En otras palabras, China está pensando en el largo plazo, cuenta actualmente con el reconocimiento facial más avanzado del mundo, es uno de los países pioneros en el desarrollo de inteligencia artificial, y es justamente este el temor más grande de la economía americana: Ser rebasados por China en la generación de las nuevas tecnologías ya que las patentes registradas en áreas claves se han desacelerado por parte de EE.UU.

 

Implicaciones para la economía mexicana

México en el corto plazo, ya se ha beneficiado de las tensiones comerciales. Nos hemos convertido en el primer socio comercial de EEUU. ¿Seguirá así? Lo peor que podría pasar, es que las negociaciones sigan sin tener avances importantes lo cual generaría demasiada incertidumbre en los mercados afectando de manera negativa al tipo de cambio y generando así presiones inflacionarias en México.

Bajo un escenario pesimista en el cual no se llega a un acuerdo, México se podría ver beneficiado ya que podríamos sustituir a china como socio de EE.UU. y, además podríamos sustituir a EE. UU en China.

Bajo un escenario optimista en el cual se alcanza un acuerdo, China estaría aceptando comprarle más productos a EE.UU. por lo que necesitaría de México para satisfacer la demanda proveniente de China. En este sentido, la inflación de EE.UU. tendería a crecer, presionando a la FED para incrementar nuevamente su tasa de interés y a su vez esto daría un respiro a la economía mexicana para lograr salir de la trampa del diferencial de tasas de interés.

¿Te ha gustado mi artículo?
Si quieres saber más y estar al día de mis reflexiones, suscríbete a mi blog y sé el primero en recibir las nuevas publicaciones en tu correo electrónico
Accede a Rankia
¡Sé el primero en comentar!

Si deseas conocer los principales drivers del mercado financiero entonces te encuentras en el blog correcto.