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Es interesante analizar los cambios en los patrones comunicativos que se están presentando en la sociedad.

Hace tiempo las opiniones se movían más lento y eso permitía procesarlas con su debido tiempo, dejarlas madurar, eso no era bueno ni malo sólo era diferente a como son las cosas ahora, podría afirmar, por ejemplo, que lo positivo de esto era el hecho de contar con una mayor libertad para analizar muy pocos eventos a la vez en lapsos de tiempo prolongados, al mismo tiempo podría criticar lo negativo mencionando que no había manera de comparar  suficiente información para corroborar que algunas ideas que se esparcían estuvieran bien fundamentadas y la única opción era quedarse con ellas.

Ahora no es mejor ni peor que en aquel tiempo, sólo es diferente. La cantidad de información que es posible recibir en los dispositivos electrónicos en un día normal es tan abundante que asimilarla y apropiarse de ella se vuelve muy costoso en términos de "precio mental" (esfuerzo intelectual), precisamente por esta razón algunos generadores de contenido digital se encargan de añadirle un "saborizante" especial a la información que transmiten para que al consumirla se olvide con mayor dificultad, estos "saborizantes" se llaman emociones y los más "sabrosos" son el miedo y la ira.

El trabajo de muchos analistas financieros, economistas y otros profesionales relacionados con el mercado de valores consiste parcialmente en monitorear constantemente las noticias, algunas de ellas contienen estos saborizantes que estoy mencionando. La idea que quiero expresar es muy simple: cada vez que aparezca alguna noticia sospechosa es necesario revisar si tiene o no saborizante con unas simples preguntas:

¿Cuál es el punto de esta noticia?

¿La persona que generó esta información estará exagerando o expresando esta con la intención de mantener mi atención y ocasionar que la recuerde por más tiempo?

Se que podría parecer algo muy obvio, pero a veces algo tan simple como esto se olvida o no existe consciencia de su existencia, después de todo si no funcionara la estrategia ya habría cambiado.

Así que recuerda, si encuentras noticias interesantes antes de consumirlas quítales los saborizantes artificiales, porque una mala noticia puede ser aún peor si la tomas tal y como te la están ofreciendo. Keep it cool.

 

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