La reciente conversación entre la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha resultado en una pausa de un mes en la imposición de aranceles del 25% a las exportaciones mexicanas. Este acuerdo incluye el despliegue inmediato de 10,000 elementos de la Guardia Nacional en la frontera norte para combatir el tráfico de drogas, especialmente fentanilo, mientras que Estados Unidos se compromete a trabajar para evitar el tráfico de armas de alto poder hacia México.
Esta suspensión temporal de los aranceles brinda un respiro a la economía mexicana, altamente dependiente del comercio con Estados Unidos. Sin embargo, la posibilidad de que los aranceles se implementen en el futuro cercano genera incertidumbre en diversos sectores económicos.
Impacto en el tipo de cambio
La noticia del acuerdo tuvo un efecto inmediato en el tipo de cambio. Tras el anuncio, el peso mexicano recuperó parte de las pérdidas que había sufrido frente al dólar, reflejando la sensibilidad de la moneda ante las tensiones comerciales.
Según datos de Investing.com, el tipo de cambio USD/MXN se encuentra en 20.6780 el 3 de febrero de 2025, con un rango diario entre 20.4525 y 20.7680.
Esta reacción del mercado indica que los inversionistas perciben el acuerdo como un alivio temporal en las tensiones comerciales entre México y Estados Unidos. Sin embargo, la volatilidad del tipo de cambio sugiere que persisten preocupaciones sobre posibles medidas arancelarias futuras y su impacto en la economía mexicana.
Efectos en la economía mexicana
La imposición de aranceles del 25% podría llevar a México a una recesión económica, con una contracción estimada del PIB entre 1.5% y 2%. Sectores clave como el automotriz y el electrónico, que representan una parte significativa de las exportaciones mexicanas, serían los más afectados.
Repercusiones en las inversiones
La incertidumbre generada por la posible imposición de aranceles puede desalentar la inversión extranjera directa en México. Los inversionistas podrían buscar mercados más estables, afectando negativamente el flujo de capital hacia el país y, en consecuencia, el crecimiento económico a largo plazo.
Es crucial que durante este mes de pausa, ambos gobiernos trabajen en soluciones que eviten la implementación de los aranceles y promuevan una relación comercial estable. La colaboración en temas de seguridad y comercio será fundamental para mantener la confianza de los mercados y asegurar la estabilidad económica de México.