¿Qué es el Estado de Pérdidas y Ganancias?

El Estado de Pérdidas y Ganancias, conocido también como Estado de Resultados, refleja a los interesados información relevante sobre las operaciones desarrolladas por una entidad o empresa durante un determinado periodo de tiempo.

En materia de contabilidad, permite evaluar el desempeño de la entidad o empresa en dicho intervalo y qué tanto impacto han generado las inversiones realizadas en sus distintos proyectos.

Por tanto, en el siguiente artículo, conoceremos mejor qué es el estado de pérdidas y ganancias. Así como otros detalles que, muy probablemente, serán de utilidad para su comprensión y aplicación.

¿Qué es el estado de resultados?

El estado de resultados o de pérdidas y ganancias, es un informe contable que, como su nombre lo indica, pone de manifiesto los ingresos y egresos de una firma.

De igual manera, otorga un vistazo a la estructura de los gastos que se han realizado, desde aquellos relacionados con el capital, hasta los operativos.

Hoy por hoy, la ejecución y estructuración del estado de pérdidas y ganancias se realiza trimestral, semestral o anualmente. Aun así, independientemente del tiempo que se utilice como filtro, el informe esclarecerá la rentabilidad de la empresa, analizando su situación financiera.

¿Cuáles son los objetivos del estado de pérdidas y ganancias?

Los Estados de Pérdidas y Ganancias (Estado de Resultados) tienen varios objetivos, entre los que figuran:

Permiten medir los logros alcanzados y los esfuerzos desarrollados por la empresa durante el periodo que se presenta.
Podemos evaluar la rentabilidad de la empresa, proporcionando una base para que los diversos inversionistas determinen la viabilidad de depositar sus recursos.
Nos refleja el desempeño de la empresa, ya que se crea una relación de ingresos y gastos. Partiendo de esos componentes, se comprobará si la empresa está generando utilidades o pérdidas.
Estimar su potencial de crédito, el cual es un factor que determina la autorización de proveedores o instituciones financieras para otorgar o ampliar líneas de crédito que faciliten la operación y expansión de la entidad.
Estimar la cantidad, el tiempo y la certidumbre de un flujo de efectivo, para tomar decisiones de requerimientos de efectivo y en caso de faltantes, planear fuentes de financiamiento. Y, de haber excedentes, determinar las alternativas de inversión, lo cual permite medir la invalidez.
Medir riesgos o las decisiones de inversión.

¿Cómo se estructura el estado de pérdidas y ganancias?

Según el autor que se cite, la estructura del estado de resultados puede variar, pero, al final de cuentas, es simétrica.

Algunos coinciden que, para determinarlo, se necesita conocer la utilidad neta, así como cada uno de los componentes que la integran. Dentro de estos últimos, se enumeran los ingresos, los costos y los gastos que presentan la empresa o entidad durante el tiempo que desea obtener.

Otros entienden al estado de resultados como la inclusión y análisis tanto del resultado bruto y resultado operacional, como del resultado neto contable de la empresa.

Cuando hablamos de resultado bruto, nos referimos a la diferencia entre la totalidad de ingresos por desempeño empresarial y los costos logísticos o administrativos. Al final, se obtiene el margen bruto o porcentaje de ventas en un período de tiempo exacto.
Con relación al resultado operacional, expresa las ganancias totales de la compañía, sin restar gastos financieros, como intereses, deuda pública, créditos bancarios, entre otros.
Por otro lado, el resultado neto o resultado de ejercicio se consigue al correlacionar la utilidad o resultado operacional con todos los gastos e ingresos no operacionales, impuestos y la reserva financiera de la firma.

¿Cuáles son los elementos del estado de pérdidas y ganancias?

Tras identificar la estructuración general del estado o cuenta de resultados, debemos mirar más allá. Sí, haremos hincapié en los elementos específicos que contribuyen a la estructuración del estado financiero en cuestión.

Como tal, son 11 instrumentos o elementos bien diferenciados:

Ventas: ingresos por la productividad y servicios de la empresa;
Costo de ventas: gastos necesarios para impulsar la productividad y servicios;
Utilidad o margen bruto: diferencia que existe entre la venta y los costos de ventas;
Gastos de operación: gastos destinados al pago administrativo, logístico y factor humano de la empresa;
Utilidad sobre flujo: ganancias de la empresa que no están sujetas a impuestos y gastos financieros intrínsecos;
Depreciaciones y amortizaciones: factor implícito que disminuye el valor tangible de un activo o pasivo por su uso en el tiempo;
Utilidad de operación: es la diferencia entre las depreciaciones, amortizaciones y utilidad sobre flujo. Su resultado enfoca las ganancias o pérdidas de la compañía con relación a sus actividades y/o desempeño;
Gastos y productos financieros: gastos no relacionados con la administración y/o logística empresarial, lo que incluye pago de deuda, intereses bancarios, etcétera.
Utilidad antes de impuestos: ganancia o pérdida empresarial previo a la tributación de impuestos;
Impuestos: tributos que deben pagarse al fisco en pro de las actividades productivas de la compañía;
Utilidad neta: es la ganancia o pérdida total tras el descuento de gastos operativos, financieros y el pago de impuestos.

Aunque no sean catalogados directamente como elementos del estado de pérdidas y ganancias, dos conceptos que valen la pena repasar son los ingresos junto con costos y gastos.

Por una parte, los ingresos, son el total bruto o neto que la empresa percibe por la prestación de sus servicios y/o sus productos.
En el caso de los costos, para fines de estados financieros, “son decrementos” de los activos o incrementos de los pasivos de una entidad durante un periodo contable. Los costos representan los esfuerzos que realiza una empresa para obtener ingresos.
Finalmente, los gastos, son disminuciones a los activos o aumentos a los pasivos que afectan la utilidad neta en un periodo contable como resultado de las operaciones primarias o normales y que tienen como consecuencia la generación de ingresos.

¿Cómo se hace el estado de pérdidas y ganancias?

Para hacer o calcular el estado de pérdidas y ganancias, tomaremos los conceptos clave ya explicados: ingresos, costos y gastos. No significa que el resto de elementos no importe, sino que están englobados en esos tres pilares.

Cuando ya se esclarezca de donde provienen los ingresos, los costos y gastos, entonces decimos que el estado de resultados depende de un cálculo matemático simple:

Ingresos - Costos y Gastos = Utilidad o Pérdida Neta

En pro del resultado final, los directivos podrán tomar decisiones financieras y económicas que impulsen la empresa en caso de pérdidas o invertir en proyectos altamente rentables si el estado de resultados arroja ganancias.

Ejemplo del estado de resultados

Supongamos que una empresa de productos de aseo personal mexicana experimentó un ingresó de 200.000 MXN, junto con costos y gastos de 90.000 MXN en un trimestre.

Para hacer nuestro balance o estado de pérdidas y ganancias, extrapolamos los valores plasmados, tanto de ingresos como de costos y gastos:

Ingresos (200.000 MXN) - Costos y Gastos (90.000 MXN) = 110.000 MXN de utilidad neta.

¿Qué quiere decir? Pues, que al final del trimestre, la compañía obtuvo ingresos útiles netos de 110.000 MXN que puede reinvertir en costos y gastos para duplicar sus ganancias.

Ahora, invirtamos los datos, teniendo que la empresa generó en ingresos 90.000 MXN y Costos/Gastos de 200.000 MXN:

Ingresos (90.000 MXN) - Costos y Gastos (200.000 MXN) = - 110.000 MXN de pérdida neta.

En otras palabras, significa que la empresa gasta más en costos de operación que lo que realmente ingresa. Por ende, necesita reestructurar su estrategia para que pueda ser rentable.

¿Cuáles son los tipos de estados financieros?

El estado de resultados forma parte de los llamados estados financieros, imprescindibles en contabilidad. Ellos, aunado al hecho de describir las finanzas de una entidad o corporación, también son sinónimo de transparencia, pues proporcionan un vistazo a la estructura económica y rentabilidad de la firma en un lapso de tiempo.

En retrospectiva, dentro de los tipos de estados financieros, podemos englobar 5 de ellos. Contando al estado de pérdidas y ganancias, restan:

El balance de situación, cuya estructura se basa en los activos, pasivos y patrimonio neto de la empresa. Ofrece un panorama verídico sobre la situación de la firma, tomando en cuenta factores como sus reservas y capital.
Estados de flujos en efectivo, demarca cuáles son las principales fuentes de efectivo, cómo se utiliza y su regularidad haciendo gala de estimaciones directas o indirectas.
Estados de cambio en el patrimonio neto cuya relación va de la mano con los ingresos y egresos netos de la compañía al inicio y fin del año fiscal.
Por último, la memoria es una documentación clave para la empresa, puesto que permite disponer del registro ampliado de las finanzas de la misma.

¿Cuáles son las ventajas de los estados financieros?

La aplicación de los estados financieros son ventajosos para distintos fines, como, por ejemplo:

Permiten evaluar la rentabilidad de una empresa y sus estrategias financieras, determinando qué tan buena es su gestión para crear utilidades netas;
Aclara los movimientos empresariales, tanto en materia de efectivo, como en todas sus operaciones transaccionales, fomentando la transparencia;
Otorgan la posibilidad de mejores decisiones financieras para impulsar los proyectos corporativos en todo sentido;
Con una mejor toma y planteamiento de decisiones, se reduce el margen de error operacional en el mercado para la compañía;
Por último, identifica las debilidades contables que representen un consumo errado y elevado de los recursos económicos.

Conclusión

En resumen, conocer sobre qué es el Estado de Pérdidas y Ganancias, permite a las personas morales, manejar los conceptos esenciales para calcular el estado financiero que muestra los resultados obtenidos por la empresa en un periodo determinado.

Con estos resultados, puedes establecer si tu empresa está logrando los objetivos. O, en su defecto, tomar medidas para cambiar la situación actual.

Por último, no está de más rectificar que el término más común para referirse al Estado de Pérdidas y Ganancias es el Estado de Resultados.