Acceder

El Capitalismo, la espina dorsal de nuestra globalización

El capitalismo ha pasado por varias etapas y diversos enfoques, o bien, intereses.  Desde sus inicios a partir de la Revolución Industrial a mediados del siglo XVIII y el surgimiento de una clase privilegiada, ya no por el poder divino, sino por los excedentes en la producción, ostentosas ganancias y la expansión de mercados. Cabe mencionar, que como en todos los grandes sucesos en la historia, existen ambivalencias, un lado amable, y otro no tanto, lo mismo ocurre con la Revolución Industrial y los impactos bilaterales y continuos que prevalecen hasta nuestros tiempos.

Los principios característicos del capitalismo; como la subsistencia del más fuerte, el fin justificando los medios, la centralización del poder, y el abismo que separa cada vez más a ricos de pobres. En un momento coyuntural como este, a finales del siglo XIX, la aparición de empresas privadas y la ruptura de una relación paternalista entre patrón y obreros, no tardó en hacerse notar. Se crea un nuevo y atractivo término, el monopolio, un nuevo control, un impacto no solo económico, también social. Pequeños negocios empiezan a ser absorbidos, se desestabilizan, en países como Inglaterra; un enemigo disfrazado de prosperidad, comienza a tomar represalias.

A costillas del progreso, las injusticias por parte de las empresas hacia los trabajadores comienzan a surgir efecto; los obreros se cohesionan, crean contratos colectivos y los primeros grandes sindicatos. Desde un enfoque político, el socialismo se asoma, seduce a la clase trabajadora.

Pasan los años, llegamos al siglo XX, la doctrina económica liberal, permite el crecimiento de los mercados mundiales, apadrina a comerciantes e inversionistas. De repente, las cosas parecen no estar funcionando, tras la primera guerra mundial, el mundo se estanca. En 1929, hay un crack bursátil, una profunda recesión económica que se origina en Estados Unidos y recae en el resto del mundo. La teoría keynesiana como panacea en tiempos de crisis. Al mismo tiempo, el globo se fisura con fines bélicos. “El fin de la depresión en los Estados Unidos se asocia con la aparición de la economía de guerra durante la Segunda Guerra Mundial, que empezó a funcionar en 1939”.

Después de esta Segunda Guerra, organismos internacionales buscan evitar conflictos y solucionar las diferencias de una manera diplomática, nace la Organización de Naciones Unidas, el Banco Mundial, y el Fondo Monetario Internacional.  De igual manera, el comercio internacional tiene una nueva cara, se crea el GATT, a través del cual se fomenta el desarrollo económico y se reestablecen vínculos comerciales entre naciones.

Entre 1970 y 1980, el neoliberalismo, surge como la evolución del liberalismo; pero esta vez, es al Estado a quien se desacredita; las actividades económicas quedan en manos de particulares, de empresas privadas. Es en los años 90´s, donde el neoliberalismo se torna multinacional, entra la Globalización a un escenario multicultural, heterogéneo. Rechaza el regionalismo, busca la homogenización de las naciones a través de las empresas trasnacionales, lo que hay en Estados Unidos se encuentra con facilidad en China. He aquí, que el monstruo capitalista despierta, vuelve con más fuerza, devora competidores, pues ya no le es suficiente controlar un mercado interno, busca el mercado internacional.  

Bibliografía: Pearson Learning Group, World History, Estados Unidos, Pearson, 2002.Taylor, M. Alan, Comercio Internacional, Estados Unidos, Editorial Reverté, 2011.Antología de textos para la asignatura de Sociología basado en la Construcción del conocimiento de las Ciencias Sociales. Rodríguez, Mauro. Acercamiento a la economía

.Autor: Janet Ramírez Martínez

Universidad: IPN ESCA Unidad Santo TomásPuesto: SocioCorreo: [email protected]

 

¿Te ha gustado mi artículo?
Si quieres saber más y estar al día de mis reflexiones, suscríbete a mi blog y sé el primero en recibir las nuevas publicaciones en tu correo electrónico
Accede a Rankia
¡Sé el primero en comentar!