Resulta que siempre no, y la propuesta para reformar la Ley Federal del Trabajo para que los trabajadores gozaran de 12 días de vacaciones se tambalea, esto a pesar de que apenas el 3 de noviembre pasado el Senado avaló la reforma y la pasó a la Cámara de Diputados para su discusión y aprobación, lo cual ya se daba por hecho que se implantara en 2023, pero ahora los diputados del partido oficial se echan para atrás.
Hay que recordar que la propuesta para ampliar el número de vacaciones en México ya se había presentado hace tres años, en ese momento no prosperó y ahora todo indica que no volverá a pasar este beneficio para los trabajadores y que duplicar los días de vacaciones pagadas quedará en otro intento, de modo que la clase trabajadora se quedará con ganas de tener 12 días de descanso.
¿Qué pasó? ¿por qué se arrepienten los legisladores?
La reforma laboral (aprobada prácticamente por unanimidad por los senadores) se encuentra atorada en la Cámara de Diputados por el partido oficial debido que este ha frenado su discusión en comisiones.
A inicios de noviembre los legisladores habían anunciado esta reforma como un gran logro y ahora no han dado a conocer las razones por las cuales se frenó la última discusión y aprobación a los cambios en los artículos 76 y 78 de la Ley Federal del Trabajo, que es en donde quedaron sentadas las reformas para que en México tuviéramos el doble de vacaciones pagadas.
Lo que se sabe hasta ahora de manera no confirmada es que:
Hubo una negociación de último momento por parte de los empresarios con el gobierno del presidente López Obrador, a pesar que ya habían manifestado su acuerdo con el aumento en los días de vacaciones.
Los empresarios de la industria maquiladora dijeron que se verían muy afectados y por ahora no aceptan esta reforma.
Los empresarios pidieron que sí se vote la ley, pero con modificaciones para que no se aplique de manera inmediata en 2023 y que se implemente hasta 2024 o 2025.
También pidieron que los días de vacaciones se apliquen de manera diferente, es decir, de una forma para las empresas pequeñas y otra para las grandes.
Las empresas no quieren que los 12 días de vacaciones puedan ser tomados de manera continua y piden que se apliquen de manera fragmentada durante el año laboral.
Al parecer la negociación de la aplicación de las nuevas vacaciones está relacionada como una ficha de cambio con la aprobación del aumento de sueldo para el siguiente año, es decir, los empresarios estarían de acuerdo con aplicar el aumento al salario mínimo de 20% que quiere el presidente a cambio de no aprobar las vacaciones de 12 días como ya se había anunciado hace prácticamente un mes.
Se había dicho que los trabajadores tendrán 12 días de descanso que irán aumentando en dos días cada año hasta llegar a 20 y que ello entraría en vigor el 1 de enero de 2023 o al día siguiente de su publicación, pero ahora ya no se sabe qué pasará con esta reforma que iba a beneficiar a millones de trabajadores que presentan estrés laboral (de acuerdo con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social).
