Ese es el problema que ya me he cansado de acudir a y llamar a todos aquellos programas, que lo único que me dicen o a dónde me mandan es al DIF, siendo que la verdad aquí en mi municipio de nada ha servido, debido a que ha resultado hasta peor, me atrevería a decir, ya que como bien mencionaba antes no soy una persona con todas mis capacidades por lo que me es casi casi imposible solamente ir a recibir una simple despensa (no lo digo por menospreciar) pero si por que simplemente lo que me cobra el taxi para trasladarme de un lado a otro; me parece que con eso ya salió lo de la despensa.
Ahora como también al principio al parecer si iba a contar con el apoyo del DIF, no se que fue lo que sucedió, por que para ese entonces se encontraba en la Presidencia municipal, la señorita, Sandra Mendez (de ella ninguna queja) ya que gracias a ella pude obtener mis lentes a un bajo precio, la cual también me mando directamente con la directora del DIF de Tultitlán, la cual en ese momento No recuerdo su nombre, pero lo que si es que dio la orden de que no se me tenían que cobrar ninguna de las terapias; las cuales contaban de lenguaje, psicología, actividades manuales y la más importante en ese momento que era para mi movilidad en todo mi cuerpo. Por lo que no sé como sucedió, por lo que las señoras encargadas de ahí me dijeron o más bien a mi mamá que: ahí a todos se les contaba por igual, sin importar quien fueran. Pero creeame que aunque no carecía tanto en ese momento de dinero, si se me complicaba, más por que tenía que pagar el pasaje, de ida y vuelta del taxi, más aparte lo de mis terapias y luego que no se trataba de una al día si no de 2 o había veces que hasta de tres en un mismo día, es por eso que decidamos desistir, la razón era muy sencilla, ya que al parecer en lugar de ayudar parecía que nos quería perjudicar, ya que había veces que hasta los $200 diarios nos llegábamos a gastar. Y eso sin contar que había en ocasiones que mi hermano nos pasaba a dejar (y si nos teníamos que espera a que abrieran las puertas), o bien la que luego nos iba a dejar por la tarde era mi tía Mary (cabe señalar que siempre hablamos contado con su apoyo económico), por lo que ahora tampoco.
Ahora si espero, me entienda Y comprenda, el por qué estoy recurriendo a ustedes, Todo sea para una ayuda económica de parte del estado de México.