Buenos días,
Sé que mi post va a sonar a chiste para los profesionales de los derivados, pero me consta que aquí hay gente que no está muy versada en la materia (yo tampoco) y creo interesante ir contando mi experiencia. Actualmente, si habéis leído este post, sabréis que en su día compré CIM y para ser honestos, confieso que con poco acierto. Equivoqué el tiro y la operación me generó minusvalías latentes que poco a poco se van reduciendo gotita a gotita vía dividendos. Pero eso no era suficiente para mí y como hacía tiempo que barruntaba la posibilidad de meterme con los derivados, utilicé CIM a modo de gaseosa. En principio, la idea es que no me importa vender CIM, puesto que no le veo recorrido al alza, pero, en vez de dar directamente la orden de venta, lo que he hecho es vender CALL, es decir, como sabéis, comprometerme a vender, en su caso, las acciones si me ejecutan el derivado al precio estipulado en el contrato, y todo ello cobrando una prima. En la práctica debemos saber varios detalles: un call (o put) hace referencia a 100 acciones del subyacente (en este caso, 100 acciones de CIM). La prima, por tanto, hay que multiplicarla por 100 para saber el importe total bruto de la operación. A esa prima hay que añadir la comisión de corretaje, que suele ser mínima.
Volviendo al ejemplo, dí la orden de venta de dos call CIM julio a 3$ con una prima de 0,10$, es decir, cobro una prima de 20$ (0,10 (prima) x 100 (subyacente) x 2 (contratos)) por obligarme a vender 200 acciones a 3$ hasta, creo recordar, el tercer jueves de julio (tendría que mirar la fecha concreta, que ahora mismo no recuerdo). Como ahora CIM está en 2,82$, el call está fuera de dinero, es decir, el que me lo compró no lo va a ejecutar. Tengo dos alternativas, puedo cerrar la operación ahora mismo, con lo que tendría que recomprar el call (obviamente más barato que cuando lo vendí) o dejar que expire sin valor los call, que será lo que haga. Moraleja, aunque hagamos una cagada financiera (como es mi caso), podemos utilizar las herramientas que nos brinda el mercado para rascar unos “pavos” a la operación. El quid de la cuestión es que a priori esta operación que no parece gran cosa, hay que relativizarla. Estamos hablando de 20$ en una operación de dos meses de duración, pero es que las acciones de CIM comprometidas con los derivados pagan alrededor de 20$ por trimestre, o sea, en dos meses he cobrado lo mismo que el dividendo trimestral.
ADVERTENCIA: Los derivados pueden ser armas de destrucción carteril, pero en este caso, el riesgo es cero de cara al derivado: si no me ejecutan el contrato, cobro la prima y puedo repetir la operación ad infinitum. Si me ejecutan el contrato, vendo las acciones, cobro el precio estipulado (la prima también, obviamente) y tan amigos. El problema está en que si conservo las acciones como garantía y los call se quedan sin valor es que el subyacente baja, o sea, cobro de los derivados, sí, pero estoy perdiendo valor de las acciones. Hay que sopesar todos los frentes muy bien para ver si compensa.
La operación inversa de cara al subyacente, en caso de que queramos comprar acciones a un precio determinado es vender un put a ese precio, cobrando la prima. Es lo mismo que poner una orden condicionada, pero en este caso cobras. A modo de ejemplo, si me interesara comprar CIM a 2,50$ (que no es el caso, ni estoy haciendo una recomendación de nada), puedo, bien poner una orden condicionada a 2,50$ que se me ejecutará si la cotización cruza ese precio; o bien, vender un put CIM 2,50$ con una prima “x”. En este último caso cobro la prima por comprometerme a comprar hasta una fecha determinada y, si no se ejecuta, repetir ad infinitum (el riesgo en este caso es el coste de oportunidad de perder la operación si no llegan a ejecutarte el derivado). Esto puede ser interesante por si a alguien le interesa seguir al maestro Bird.
Un saludo.