Probablemente te encuentres desbordada o desbordado en este momento a causa de tu situación financiera y el tema de las deudas, sigue siendo el rey en temas de estrés financiero.
Me dedico a lo que me dedico porque llegué a deber 1 millón de pesos en tarjetas de crédito.
Aunque (aquí entre nos) fue la segunda vez que debía, la primera, siendo soltera y llegó hasta los 300 mil pesos.
Recién me acababan de despedir (del que sería mi último trabajo bajo el esquema de empleada ) así que tenía una buena cantidad para liquidarlas. Quise jugarle al estratega financiero y liquidé mis deudas vía quita. Qué gran error (pero eso es para otra historia).
Hace 7 años de esto.
En ese entonces , no existía la variedad de asesores en finanzas personales que existen ahora. Por lo tanto, me tuve que “ auto asesorar” y comenzar lo que sería, 4 años más tarde, el pago total de mis deudas.
Noto que comúnmente se omiten en tema de deuda: el aspecto emocional .
Eligen sistemas de gestión para salir de ellas , como por ejemplo el “ Bola de nieve” es el favorito de los mentores , por cierto.
El sistema funciona pero, no es a prueba de nuestra irracionalidad financiera.
La economía conductual, especialmente Dan Ariely , lo comenta todo el tiempo somos seres irracionales y por supuesto que esto se refleja en nuestras finanzas personales. Benditos sesgos cognitivos.
Entonces ¿Qué hacemos con la parte no-técnica? ¿Con esas habilidades blandas que se necesitan para salir de ese capítulo monetario oscuro de nuestra vida?
Recuerda que ya estuve ahí dónde tú estás , y esto es lo que me hubiera gustado que alguien me dijera:
Me dedico a lo que me dedico porque llegué a deber 1 millón de pesos en tarjetas de crédito.
Aunque (aquí entre nos) fue la segunda vez que debía, la primera, siendo soltera y llegó hasta los 300 mil pesos.
Recién me acababan de despedir (del que sería mi último trabajo bajo el esquema de empleada ) así que tenía una buena cantidad para liquidarlas. Quise jugarle al estratega financiero y liquidé mis deudas vía quita. Qué gran error (pero eso es para otra historia).
Hace 7 años de esto.
En ese entonces , no existía la variedad de asesores en finanzas personales que existen ahora. Por lo tanto, me tuve que “ auto asesorar” y comenzar lo que sería, 4 años más tarde, el pago total de mis deudas.
Noto que comúnmente se omiten en tema de deuda: el aspecto emocional .
Eligen sistemas de gestión para salir de ellas , como por ejemplo el “ Bola de nieve” es el favorito de los mentores , por cierto.
El sistema funciona pero, no es a prueba de nuestra irracionalidad financiera.
La economía conductual, especialmente Dan Ariely , lo comenta todo el tiempo somos seres irracionales y por supuesto que esto se refleja en nuestras finanzas personales. Benditos sesgos cognitivos.
Entonces ¿Qué hacemos con la parte no-técnica? ¿Con esas habilidades blandas que se necesitan para salir de ese capítulo monetario oscuro de nuestra vida?
Recuerda que ya estuve ahí dónde tú estás , y esto es lo que me hubiera gustado que alguien me dijera:
Esto no te define.
La situación que pasas es solamente un episodio de tu vida. Por atención : no eres deudor o deudora . Sólo estás atravesando por un proceso , pero saldrás de ahí. No te etiquetes bajo ninguna circunstancia.
Enfrenta tu realidad lo antes posible.
Lo antes posible. Siéntate, toma el tiempo y comienza a enumerar tus deudas. No son válidas las aproximaciones de las deudas : Es necesario que sepas todos y cada uno de los decimales así como fechas de pago, penalizaciones y si…conocer cuál sería el peor escenario.
Recupera tu poder inmediatamente.
Comprende, que esta situación tú la creaste : Podrás culpar al banco por los altos gastos, a tu primo por que no te pagó la deuda cuando le prestaste la tarjeta de crédito, a tu mamá por volverse a endeudar , y otras tantas historias que he escuchado a lo largo de estos años. Al final, fue tu responsabilidad .( por supuesto, si tienes deudas por que te hicieron un fraude bancario, pues no aplica para ti) .
Lo divertido: si tú creaste esta situación tú puedes crear la solución .
Recuerda que el dinero es una habilidad .
Gestionar tus activos , aprender sobre inversiones incluso reconocer y gestionar tus patrones nocivos de comportamiento son habilidades que puedes desarrollar y mejorar.
Roma no se construyó en un día y es probable que lleves gran parte de tu vida teniendo errores financieros, así que , ten el cuidado de tener suficiente paciencia y sobre todo , un alto grado de compasión para ti y tu proceso. Lo que menos necesitas en estos momentos es la señora loca de tu mente diciéndote constantemente que eres un fracaso financiero . Lejos de ayudar , sólo alimenta la angustia.
Ahonda en tu relación con el dinero.
Ahora es cuando, de verdad. No esperes hasta que tus deudas se liberen , de lo contrario no podrás apreciar de manera directa y clara las circunstancias internas que te llevaron a esta situación.
¿ Eres negligente con él? ¿ Sientes incomodidad por ser próspero / próspera? ¿ Gastas por aburrimiento? ¿ Sabes qué es lo que compras cuando compras?
Generalmente, detrás de hábitos deudores , tenemos lo que llamo “ heridas financieras”.
Nuevamente, sé compasivo, compasiva.
Hincapié en este punto por que es el que más ignoran.
La situación ya te tiene muy estresado,estresada. No alimentes más a esa mente prejuiciosa y sumamente dura que te recuerda una y otra vez lo enormes fallos que has tenido o el eterno reclamo interior del por qué hiciste las cosas como hiciste.
No somos una cultura que creció hablando de dinero, es más , si te educaron con el Manual de Carreño es muy probable que incluso, consideran que es vulgar hablar de dinero.
Tantos prejuicios, no nos permiten caminar por este proceso con una mejor actitud.
Estar en deudas puede ser un espacio muy doloroso e incluso vergonzoso ; no te lo hagas más difícil.
Ya pasé por ahí. Así que te puedo contar que si puedes salir, y quién sabe, tal vez un día te conviertes en entrenadora financiera. Todo puede pasar.
Te dejo mi historia deudora en este podcast.
Me llamo Liliana Zamacona y me encuentras en IG @lachinafinanciera. Escríbeme y cuéntame qué historias financieras te interesan.