En este nuevo inicio del ciclo escolar 2022-2023 muchos niños, niñas y jóvenes se estrenan asistiendo a escuelas nuevas o por primera vez, por ejemplo, los más pequeños que acuden a preescolar y primaria y con ellos sus papás también inician esta aventura con ellos de modo que los padres deben saber que las colegiaturas son deducibles de su pago de impuestos ante el Sistema de Administración Tributaria (SAT).
Estas deducciones son un estímulo fiscal con el cual desde 2013 se puede lograr la recuperación de una parte de los impuestos que pagamos, y ahí es donde el pago de colegiaturas cobra importancia. Recordemos que se puede deducir el pago de colegiaturas desde preescolar hasta bachillerato y que se deben cubrir ciertos requisitos:
Las escuelas deben tener autorización o reconocimiento de validez oficial por parte de la SEP.
Las inscripciones o reinscripciones no se pueden deducir, sólo los servicios de enseñanza, es decir las mensualidades pagadas.
Los pagos de las colegiaturas deben ser efectuados por el contribuyente, para su beneficio, el de su cónyuge, concubina/o, hijas e hijos.
Las personas para las que se facturen las colegiaturas no deberán tener ingreso igual o superior a un salario mínimo.
Los pagos deben ser por transferencia electrónica, pago con tarjeta o cheque.
Facturas señaladas como donativos o cuotas no son deducibles.
Aunque algunas escuelas piden el CURP del alumno ello no es un requisito fiscal.
Las deducciones tienen os siguientes límites:
Preescolar, 14 mil 200 pesos.
Primaria, 12 mil 900 pesos.
Secundaria, 19 mil 900.
Profesional técnico, 17 mil 100.
Bachillerato o equivalente, 24 mil 500.
Si el hijo o la hija cursó en el mismo año dos niveles distintos, el límite de la deducción será el monto mayor entre ambos niveles educativos, por ejemplo, si pasó de kínder a primaria o de primaria a secundaria.
