Cuando hablamos del crédito sin una perspectiva financiera, solemos creer que es una extensión de nuestro salario o ingresos, pensamos en sacar productos y servicios por pequeños pagos al mes, y cuando nos damos cuenta, tenemos pequeñas deudas acumuladas que en su conjunto, se vuelven impagables, obligaciones de las que parece jamás saldremos.
Con el entendimiento y manejo de las finanzas personales, el buen uso de las tarjetas puede simplificar nuestras vidas, sin embargo, un mal manejo nos puede poner en altos riesgos financieros, por lo que hablaremos de los principales factores a contemplar para un correcto uso de las mismas.
Diferencias entre crédito y débito
Comenzando por diferenciar entre tarjetas de crédito y débito, estas últimas son aquellas que usan el dinero que ya se tiene depositado en la cuenta, siendo prácticamente un sustituto del efectivo. Un factor clave a considerar, son aquellos gastos hormiga, es decir, que son pequeños, pueden ser frecuentes y parecen no impactar, pero en su suma tienen un mayor impacto económico de lo que pensamos, por ejemplo, los costos/comisiones por disposición de efectivo (cuando aplican) pueden ignorarse, pero son muy importantes, por lo que debemos procurar retirar efectivo el menor número de veces posibles bajo costo, así como hacer compras donde se cargue un porcentaje adicional al pago con tarjeta.
Por otro lado, la tarjeta de crédito nos permite hacer compras en el momento para pagarlas después, es decir, cuando realizamos una compra, el banco nos está brindando un préstamo que debemos pagar en un periodo establecido.
Éstas suelen ser más seguras para las compras en línea, y son esenciales para formar nuestro historial crediticio, el cual evalúa el historial de pagos a tu tarjeta y la antigüedad, lo que brindará puntaje crediticio y propiciará a obtener mejores oportunidades de financiamiento, así como tasas de interés más atractivas al aplicar para créditos más grandes, por ejemplo, para un crédito hipotecario.
Además, los pagos a meses sin intereses son una excelente alternativa para nuestras diversas metas financieras y adquisiciones.
Desde otro punto de vista, muchas personas no saben cómo usar su tarjeta de crédito, y desconocen conceptos básicos como la tasa de interés o pagos mínimos, generando además un espejismo de tener más dinero del que realmente existe, pues los saldos en esas tarjetas no son nuestros (a diferencia de una tarjeta de débito), sino del banco.
Conceptos básicos
- Saldo: es el dinero que asigna el banco, según la capacidad de endeudamiento del cliente; dependerá de sus ingresos, deudas e historial crediticio. Por ejemplo: se asigna una tarjeta de crédito con un saldo de $10, 000.00, siendo éste el dinero extra disponible, y al ir gastando, se irá descontando del saldo inicial, pero que al pagar la cuota de este préstamo, volverá a estar disponible para su uso.
- Tasa de interés: es el costo del dinero a pagar al banco por los movimientos hechos con la tarjeta, en otras palabras, podríamos decir que es la ganancia del banco por brindarte dicho préstamo.
- Cuotas a diferir: es el plazo al que se pagará lo adquirido. A más cuotas, más intereses (según la tasa) y mayor pago por el producto adquirido.
Ejemplo, queremos comprar un producto que cuesta $5,500.00.
A) a un plazo de 6 meses, pagamos $920. Si multiplicamos los 920x6, obtenemos un monto a pagar final de $5,520.00.
B) a un plazo de 12 meses pagamos $500. Si multiplicamos los 500x12, obtenemos un monto a pagar final de $6,000.00
Con ello, podemos ver que es más conveniente tener cuotas o plazos más cortos, aunque el pago mensual parezca ser más grande.
- Cuota de manejo: es un costo fijo que cobran las entidades por mantener activa dicha tarjeta, la cual varía dependiendo del producto. Algunas tarjetas cobran una cuota anual, por lo que siempre es importante considerar lo que ofrecen, sus condiciones, así como saber si realmente usarás los incentivos que otorgan.
Clasificación según el tipo de pago
Cabe recalcar que las necesidades de cada persona son diferentes, por lo que se deberá tomar en cuenta nuestro perfil antes de optar por alguna de las siguientes alternativas y estrategias de financiamiento.
- Crédito para un solo pago: las compras realizadas se abonarán en un solo pago dentro de un plazo definido después de la venta y usualmente no se cobran intereses, es decir, se debe devolver el 100% de lo que se haya utilizado y en una sola exhibición; no se puede fraccionar.
- Tarjeta de pago fijo: las compras realizadas se pagan en dos o más pagos programados de manera periódica por un determinado monto, el cual incluye el interés.
- Crédito revolvente: se pueden efectuar diversos tipos de compra, siempre y cuando el monto no sobrepase el límite de crédito asignado; el dinero se reintegra periódicamente conforme los pagos realizados, conllevan un monto mínimo requerido o un monto más alto. Además, se cobra interés sobre el saldo pendiente en la cuenta.
- Tarjetas Oro y Platinum: suelen ser las mejores en la línea de tarjetas de crédito. Los bancos emisores normalmente requieren a los tarjetahabientes que cumplan con normas más altas de ingresos y capacidad crediticia.
También se clasifican acorde al color del plástico, diferenciando por la jerarquía del producto. Por bajo costo: sin anualidad, sin comisiones, con tasa baja, con transferencia de saldos y tarjetas de servicios. Por recompensas: las de millas de viajero y las de puntos. A su vez, existen tarjetas para universitarios y aquellas que ofrecen exenciones a los que no pueden comprobar ingresos.
Reestructurar la deuda de tarjeta de crédito
Antes de tomar una estrategia financiera, debemos analizar si es lo más conveniente, acorde a lo siguiente:
- No aceptar cualquier oferta con tal de salir del apuro.
- A mayor plazo de pago, mayores intereses; tal como el ejemplo que vimos sobre las cuotas en el punto pasado.
- Considerar que las estrategias o reestructuras que ofrezcan por atención telefónica, no son las mejores, inclusive podrían ser más perjudiciales para ti, ya que no contamos con el contrato para leer entre líneas qué es lo que estamos aceptando.
- Comparar con diversos bancos.
- Aunque estemos más apretados, no caer en la tentación de contraer más deudas con la misma tarjeta, ni con otras, ni por otro lado, ya que crearás una bola de nieve imparable.
- En lugar de gastar más, reducir gastos y buscar un ingreso extra para terminar de liquidar lo más pronto posible; aprender el arte de las ventas puede servir para encontrar otras entradas de dinero fáciles y rápidas, nada que te pida hacer una inversión para empezar.
- No des un SÍ el mismo día; date tiempo de ir a casa, investigar, comparar, hacer cuentas y validar si efectivamente puedes pagar dicho monto al mes.
- Conoce bien la tasa de interés y comisiones; una estrategia es saldar una tarjeta con otra, pero si haces esto, la tarjeta que utilices para liquidar, debe tener una tasa menor para que sea conveniente y no contraproducente, parecerá obvio pero no siempre lo vemos, ya que por el apuro, tomamos la primera opción que se nos cruce.
- Realiza una tabla de amortización, de tal manera, conocerás cómo se irá moviendo la deuda a lo largo del tiempo.
Ejemplo:
Saldo inicial: $12,000.00 Periodo: Mensual
Tasa interés: 2.50% Plazo: 6
Periodo | Cuota | Pago de Intereses | Pago de Capital | Saldo |
1 | $2,178.60 | $1,878.60 | $300.00 | $10,121.40 |
2 | $2,178.60 | $1,925.57 | $253.04 | $8,195.84 |
3 | $2,178.60 | $1,973.70 | $204.90 | $6,222.13 |
4 | $2,178.60 | $2,023.05 | $155.55 | $4,199.08 |
5 | $2,178.60 | $2,073.62 | $104.98 | $2,125.46 |
6 | $2,178.60 | $2,125.46 | $53.14 | $0.00 |
Consejos
- Elige el pago con tarjeta de crédito SÓLO para compras a meses SIN intereses, para no descapitalizarte en un periodo y siempre sabiendo que pagarás sin problemas o aprietos el total de tu deuda.
- No tengas más de 1 o 2 compras a meses; si adquieres, por ejemplo, una laptop, espera a liquidarla para comprar un celular; aunque en ese inter, puedes en lugar de comprarlo a meses, ir ahorrando-invirtiendo para que puedas comprar el celular al contado o tengas la mayor parte al momento de adquirirlo.
- Siguiendo con el punto anterior, es mejor contar con un ahorro, y usarlo para ir pagando mes con mes, por ejemplo, si el celular que vas a adquirir cuesta $20,000.00, con mensualidades de $1,000.00 y cuentas con $5,000.00, ya tienes 5 meses cubiertos (aparta ese dinero y no lo gastes en otras compras).
- Ten un crédito equivalente máximo a la mitad de tus ingresos fijos, es decir, si tus ingresos son de $30,000.00, ten una tarjeta con $15,000.00 máximo. Esto facilitará el pago de la misma, ya que recordemos que no es una extensión de tu sueldo o ingreso, por lo que tener uno menor a tu entrada de dinero, permitirá realizar compras estratégicas, donde no te descapitalices, y tampoco te endeudes, logrando su pago oportuno y sencillo al contar con el doble de ingresos.
- Si usamos nuestras tarjetas sabiamente, hacen nuestras vidas más sencillas, ya que no cargar efectivo es más seguro, nuestros estados de cuenta ayudan a saber en qué gastamos y cuando, y son una excelente referencia para presupuestar y, reducir o eliminar gastos innecesarios.
Adquiere el hábito del registro, en el artículo pasado hablamos de la técnica de los 6 sobres para hacer rendir nuestro dinero, donde la premisa está en contar con un registro lo más minucioso posible sobre cada una de nuestras entradas y salidas de dinero, sin importar que tan pequeño sea el monto, ya que esto nos permite aprender a controlar nuestro dinero, y eliminar nuestras deudas eligiendo cuándo usar nuestra tarjeta de crédito y cuando la de débito.