Las tasas de interés negativas son un incentivo para que los bancos presten dinero al público, para que de esta manera se pueda reactivar la economía, es una medida para lograr objetivos de inflación pero puede afectar la estabilidad económica, esto implica que los bancos comerciales presentan pérdidas cuando depositan su liquidez en el banco central ya que pierden poder adquisitivo, esta medida se utiliza para aumentar el crecimiento económico y aumentar la inflación además de querer influir en el tipo de cambio debido a que se incentiva invertir en otras divisas con mayores tasas de interés, con esta depreciación cambiaria lo que promueve son las exportaciones que esto a su vez traería consigo crecimiento.
Aunque es una medida riesgosa países como Dinamarca que actualmente tiene una tasa de interés negativa de -0.65%, está dispuestas a aceptar pequeñas pérdidas temporales en lugar de arriesgarse a tener un problema mayor, esto debido a que la situación actual en los mercados financieros resulta volátil e incierta probablemente por la desaceleración económica generalizada.
Japón por su parte a mediados de 2016, opto por una tasa negativa y anunció que les cobraría a los bancos comerciales una comisión del 0.1% de sus reservas que mantengan en el banco central, la idea es alentar a los bancos a utilizar su dinero para un uso más productivo, prestándolo a hogares y empresas, algo que debería fomentar el crecimiento económico. Los bancos están tratando de elevar los precios al consumidor, la caída de estos perjudica los ingresos corporativos, evitando que las compañías aumenten los salarios o gasten en nuevos proyectos.
El Banco Central Europeo mantuvo una tasa de interés de cero desde mediados de 2012 y negativa desde mediados de 2014, para evitar expectativas deflacionarias. El diferencial de tasas de interés entre Europa y Estado Unidos ha contribuido a la depreciación del Euro respecto al Dólar.
También el banco central de Suiza bajó la tasa de interés en 2014 a un -0.75%, uno de los motivos fue para debilitar el franco suizo, para estimular la economía y aumentar la inflación.
En resumen, las tasas de interés negativas significan que los depositantes pagan dinero por ahorrar, algo contrario a las reglas normales de la economía. La desaceleración en cualquier ciclo económico es normal, las tasas de interés negativas no son una solución al problema, es una medida que se implementa luego de que hayan fracasado las medidas tradicionales, además de peligrosa ya que podría provocar una crisis inmobiliaria ya que este tipo de créditos se ven favorecidos con este tipo de tasas.
