Perspectivas Económicas sobre el Incremento al Salario Mínimo en México

Como parte de una política para reducir la brecha de la desigualdad salarial en el país, el salario mínimo en México será incrementado para 2021 según un acuerdo (por decisión dividida) al que llegó la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CONASAMI) el pasado miércoles 16 de Diciembre del 2020.

 

Se piensa que dicho incremento no dañará la economía nacional sino más bien, por el contrario, se espera que a causa de ello aumente la capacidad de consumo y la dinámica en el mercado interno.

 

El salario mínimo tendrá un alza de 15% para 2021, ya que pasará de $123.22 a $141.70 diarios mientras que en la Zona Libre de la Frontera Norte el incremento será de $185.56 a $213.39 diarios, manteniendo así el incremento a doble dígito por cuarto año consecutivo (16% en 2018 y 2019 más un 20% en 2020) siguiendo con las perspectivas de recuperación que existen para México en éste 2021; mismas que se enfocan principalmente en seguir  desarrollando avances científicos enfocados a encontrar vacunas para controlar la epidemia, también  se espera un repunte masivo del turismo en sincronía con los avances anteriormente mencionados, así como implementar mejoras significativas en el consumo interno e importación de productos.

 

Una de las "posibles consecuencias" importantes a considerar es la pérdida de competitividad  de las compañías que comiencen operaciones en territorio nacional con otras de inversión extranjera que radican en el país.

 

La incertidumbre se presenta en el hecho de que, el incremento de los salarios mínimos (para efectos de requerir posibles negociaciones en los contratos colectivos) atraiga como consecuencia que un número considerable de micro, pequeñas y medianas empresas enfrenten problemas económicos debido a la falta de capacidad para hacer frente a éstos nuevos compromisos que se presentan, luego de haberse experimentado una difícil situación económica y financiera producto de la crisis sanitaria COVID-19.