Independientemente si somos millenials, centenials, generación X o Z, la gran mayoría de los mexicanos soñamos con llegar a tener una casa propia, pero vamos más allá de soñar, trabajamos incansablemente para lograrlo. Claro, las circunstancias y posibilidades de cada uno tienen sus particularidades, así que, mientras unos pocos poseen el modo de adquirir una vivienda digna a corto plazo, para muchos otros es una meta que conlleva dedicarle años y años de su vida laboral.
Y aunque las circunstancias de cada persona sean distintas, el panorama general del mercado hipotecario en México es el mismo para todos los sectores. A continuación te hablaré de cómo ha sido históricamente el mercado hipotecario en México y qué podemos esperar en los meses y años venideros.
¿Cómo era el mercado hipotecario antes y durante la pandemia?
Desde hace mucho tiempo, específicamente desde la década de los 70´s, es decir, hace ya cincuenta años, con la creación del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (INFONAVIT) y el Fondo de la Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (FOVISSSTE), ambos institutos creados en el mismo año, 1972, los ciudadanos mexicanos han encontrado una forma de financiamiento hipotecario al alcance del grueso de la población, que si bien, es una deuda que adquieren por gran parte de su vida, es también el medio más accesible.
Aunque durante el primer año de pandemia, hablando en materia laboral, hubo recortes que mermaron la economía de muchos ciudadanos, los créditos hipotecarios tuvieron tasas de interés bastante bajas del 7.75%, lo que facilitó que miles de personas lograran adquirir un inmueble para vivir o rentar.
El 2022 se caracterizó por un año complicado en el sector vivienda y su financiamiento por los incrementos en la inflación, lo cual impactó en los recursos disponibles de las personas, y también en mayores costos de financiamiento y en los precios de las casas.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) detectó que hasta octubre del 2022, el número de créditos nuevos fue de 122 mil 200, lo que significó una disminución de 1.6% con respecto al mismo mes de 2021; sin embargo, el monto colocado fue de 235 mil 200 millones de pesos, lo que significó un alza del 8.8% en el mismo lapso de referencia.
¿Qué viene en 2023 para el sector hipotecario?
Actualmente, con la inflación y la subida de las tasas de interés por parte del Banco de México, la tasa de interés estará por encima del 10%, lo que podría significar una disminución mínima en la colocación de los créditos hipotecarios en comparación con años anteriores.
Sin embargo, el adquirir una vivienda sigue siendo una prioridad, por lo que la demanda sigue en pie a pesar de las adversidades.
Es importante recordar que los créditos hipotecarios en México en su mayoría son en pesos, tasas fijas y pagos conocidos, y se incluyen seguros de vida y daño; dicha estructura permite que en épocas de alta inflación y crecimiento en las tasas de referencia solo se resienta el impacto en las tasas de los nuevos créditos, sin afectar los créditos ya otorgados.
Según cifras del Banco de México, se espera mantener un escenario con un alza de la tasa hipotecaria marginal del 10.20%, la misma que se mantuvo en el último trimestre del 2022, por lo que se espera una elevación de hasta 10.50% durante este primer trimestre del 2023, el cual está por concluir; y se prevé que las condiciones mejoren para la segunda mitad del año.
Dentro de las perspectivas durante este año, se tiene que mencionar el incremento en el valor de los inmuebles debido a un mayor costo en los materiales de construcción y en el financiamiento.
De acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (CANADEVI), el valor de las viviendas crecerá durante el año por arriba del 10%, lo cual requiere un mayor financiamiento o ahorro previo de las personas.
De acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (CANADEVI), el valor de las viviendas crecerá durante el año por arriba del 10%, lo cual requiere un mayor financiamiento o ahorro previo de las personas.
Sin embargo, ante esta situación que impacta directamente en la demanda de vivienda, las instituciones toman medidas a fin minimizar dicho impacto. Con este objetivo en mente, la banca comercial y otras instituciones de financiamiento ofrecen diversos productos como alternativas para que los usuarios interesados puedan adquirir un crédito hipotecario en base a los nuevos escenarios sociales.
Por ejemplo, Infonavit y Fovissste están dando mayor difusión a las modalidades de coacreditados con el cónyuge, padres, hijos e incluso conocidos. También están abriendo el abanico de posibilidades de adquirir no solo casa, sino terreno o efectuar una remodelación a una casa ya construida que pertenezca a un familiar directo.
El crédito hipotecario en 2023 se estima mantenga un doble dígito, pero sin llegar a elevarse demasiado, de hecho, se especula en el medio que las condiciones a lo largo del año irán mejorando y se podrán mantener o incluso bajar las tasas, esto siempre y cuando la tasa de referencia e inflación se mantengan y que la economía global comience a “enfriarse”.
Si estás pensando en adquirir vivienda este año a través de un crédito hipotecario, no desistas, analiza las nuevas opciones de financiamiento que ofrecen las instituciones y aprovecha la que mejor se acomode a tus circunstancias.
Recuerda que no existe una certeza de que las condiciones globales mejorarán o empeorarán, así que si mejoran, no tendrás de qué preocuparte; y si empeoran, ¿no crees que es mejor hacerlo ahora antes que sea más complicado?