Ponerse una meta es indispensable y en materia de inversiones lo es aún más, pero cuando hablamos de inversiones y objetivos ¿Sólo se puede considerar el largo plazo? De ninguna forma, también es posible alcanzar tus metas financieras en el corto plazo, lo importante es que tus objetivos tengan un horizonte de inversión bien definido.
¿Cómo invertir y alcanzar tus metas de corto plazo?
Generalmente las metas de corto plazo son objetivos que nos proponemos cumplir en un periodo de no más de un año. Invertir en periodos cortos es posible a través de un abanico muy amplio de instrumentos de inversión. No basta sólo con ahorrar; el ahorro simplemente es el comienzo, una vez que contamos con recursos que planeamos utilizar para un objetivo en el futuro, el siguiente paso es invertirlos. Invertir nos acerca más a nuestras metas ¿Por qué? Simple:
- El ahorro no multiplica el dinero, el invertirlo sí.
- Invertir a través de instituciones reguladas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores te garantiza que tu dinero estará seguro.
- Invertir con objetivos de corto plazo te prepara para el siguiente nivel, que es diversificar tu inversión con horizontes más largos y con mayores retornos.
En este punto nos empezamos a cuestionar en qué invertir los recursos. La cantidad de opciones es amplia y para esto existe una máxima que es invertir de acuerdo a tu perfil de inversionista, a través de este sencillo cuestionario podrás alinear los instrumentos que utilizarás con tus necesidades. Para un horizonte de corto plazo, es casi una regla que los instrumentos de inversión son bonos o también conocidos como instrumentos de deuda denominados en pesos, aquí embonan principalmente los Cetes en sus diferentes vencimientos: 28, 90, 182 y 360 días, no es recomendable invertir en otras monedas y mucho menos hacer inversiones en bolsa.
Invertir con un horizonte de corto plazo tiene como finalidad obtener un retorno casi inmediato. Existen algunos inversionistas muy experimentados y con amplios conocimientos en materia de inversiones que realizan compras y ventas en periodos cortos buscando capitalizar los movimientos de los mercados de renta variable, estos especulación en periodos cortos también denominada como trading no es recomendable para inversionistas que no cuentan con la experiencia para soportar la volatilidad del mercado, muchas operaciones de trading suelen ser perdedoras y cuando existe un objetivo bien definido en el corto plazo, este puede ponerse en riesgo al involucrarse en operaciones con altos niveles de incertidumbre.
Si no estás seguro de qué instrumento elegir, acércate a un asesor de inversiones en alguna casa de bolsa u operadora de fondos de inversión, él te asesorará y te permitirá invertir y conseguir tus metas de corto plazo.